Entre los retos y preocupaciones que le esperan a Rafael García como nuevo delegado del Gobierno está, por encima de todo, la frontera. Y en especial la aduana comercial. Y, por si acaso, aunque es improbable que se le hubiese pasado por alto, el ministro de Presidencia, Félix Bolaños, se ha encargado de recordar que “las actuaciones de la Delegación del Gobierno ahora serán importantes para que tengamos una aduana moderna. En la frontera tenemos un reto y vamos a poner lo mejor de nosotros mismos para conseguir una frontera moderna y una aduana que sea operativa”.

Una aduana que abre nuevas posibilidades al desarrollo de la ciudad autónoma que ha sido posible, ha remarcado Bolaños, gracias al nuevo marco de relaciones de buena vecindad con Marruecos. “Se abren unas expectativas muy favorables, muy positivas para Ceuta y las ciudades autónomas, tanto Ceuta como Melilla, son conscientes de la importancia de tener unas relaciones de buena vecindad, de gran cooperación con nuestro vecino marroquí”.

El ministro de Presidencia ha enmarcado esta nueva situación de paz diplomática con Rabat como otra de las iniciativas para el desarrollo y la estabilidad de Ceuta. “Es otra de las políticas del Gobierno de España que tanto puede beneficiar y está beneficiando ya a Ceuta, que es la nueva relación con el Reino de Marruecos”.