El OAST admite que necesita más funcionarios pero contrata al ex asesor de Delegación de directivo

El OAST admite que necesita más funcionarios pero contrata al ex asesor de Delegación de directivo
Verdú, en segundo plano tras el delegado del Gobierno.

- Servicios Tributarios refleja en un informe que necesita cuatro empleados más para hacer frente al aumento de inspecciones en el capítulo de importaciones y cubrir las bajas por enfermedad

- En la justificación del polémico contrato se retrotrae al Estatuto de Autonomía, el desarme arancelario de Marruecos e incluso la compensación del IPSI

- Una designación directa, para la que es necesaria la creación de un nuevo puesto hasta ahora inexistente, que ha indignado a sindicatos y oposición


El Organismo Autónomo Servicios Tributarios necesita al menos cuatro funcionarios más para hacer frente al trabajo diario y cubrir las vacantes por enfermedad de larga duración, una necesidad más perentoria si cabe con el aumento de controles e inspecciones en el capítulo de Importación; pero, paradójicamente, contrata a un directivo, según argumenta en un informe al que ha tenido acceso Ceutaldia.com.

Y no contrata a uno cualquiera sino a Francisco Verdú, funcionario de la Ciudad en excedencia desde que fuera contratado como asesor de Delegación de Gobierno durante el mandato de Francisco Antonio González, cargo que ha ostentado también con Nicolás Fernández Cucurull en la plaza de los Reyes.

Una designación directa, para la que es necesaria la creación de un nuevo puesto hasta ahora inexistente, que ha indignado a sindicatos y oposición que consideran el nombramiento tan injusto como ilegal, pero que el OAST considera urgente y necesaria por necesidades de plantilla: “En Servicios Tributarios estamos padeciendo una minoración sustancial en lo que a personal se refiere, no olvidemos que en la actualidad contamos con una vacante que ha sido incluido en la OPE 2016, a la que tendríamos que añadir principalmente el número de bajas por enfermedad de larga duración del personal. Consecuencia de los anterior, sólo en este ejercicio contamos con cuatro administrativos menos en el ejercicio de sus funciones”. Es por ello que considera justificada la creación de un nuevo puesto.

Servicios Tributarios considera de imprescindible además la designación de un nuevo directivo en el Organismo Autónomo dependiente de la Consejería de Economía y Hacienda ante la “inminente creación de la Unidad de Inspección Frontera-Puerto, consistente en unir nuestra unidad existente en el Punto de Atención al Transporte Terrestre (PATT) del Puerto de Ceuta, por lo que el OAST “solicita de la Ciudad que a ser posible, adscriba a este organismo, personal administrativo que supla las deficiencias existentes tal como se llevó a cabo en 2007, fecha de creación de este organismo”. Y, para apuntalar su argumentario, el informe del OAST apela a un recorrido por la historia de la Economía de Ceuta, desde la aprobación del Estatuto de Autonomía, la creación del IPSI, el desarme arancelario de Marruecos

Los sindicatos, en cambio, no piensan lo mismo. Para UGT el traslado es abiertamente ilegal y exigen a la Ciudad la inmediata anulación del decreto de adscripción provisional del ex jefe del Gabinete del Delegado de Gobierno al Organismo Autónomo Servicios Tributarios y que “dejen de inventarse vacantes para colocar a sus amigos descolocados”.

CSIF, por su parte, denuncian “una vez más la irresponsable gestión de los recursos humanos del Organismo Autónomo Servicios Tributarios (OAST) en cuanto a la provisión de los puestos de trabajo”, por entender que “se siguen vulnerando los derechos de los trabajadores según establece el Estatuto básico del empleado público y la limitación legal presupuestaria”. Un puesto creado “con calzador” denuncian desde CSIF, recordando “dicho sea de paso” que para ese mismo puesto se postularon funcionarios que ya forman parte del OAST, “siendo legal presupuestariamente” y se les rechazó “esgrimiendo que era necesario ser categoría C1 y la deseada era C2”. Un requisito que, denuncia CSIF, no se ha tenido en cuenta con el nombramiento en cuestión, “ahora gusta ser al contrario”, lamentan.

A juicio de Comisiones Obreras, la contratación del político del Partido Popular se sitúa fuera de la legalidad y no descarta acudir a los Tribunales para paralizar el contrato y en su caso exigir responsabilidades a todo el que haya participado en “esta pantomima” para colocar a Verdú en el Organismo Autónomo Servicios Tributarios (OAST), nada menos que al frente de la oficina del Tarajal. Comisiones Obreras no dudó en calificar al OAST como “un nuevo cortijo del Ayuntamiento” con el consentimiento “de todos los señoritos de dicho cortijo”.

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