MENORES

Una orden sin firmar y una repatriación sin protocolo

Una orden sin firmar y una repatriación sin protocolo
Salvadora Mateos y Grande-Marlaska
Salvadora Mateos y Grande-Marlaska, en una imagen de archivo.
El Ministerio del Interior dice que Rabat "garantizará los derechos de los menores hasta que sean entregados a sus padres lo antes posible, y en el caso de no existir padres, L’Entraide Nationale se hará cargo de los menores".

La devolución a su país de menores marroquíes solos acogidos en Ceuta desde mediados de mayo que ha comenzado este viernes se basa en una orden de la Secretaría de Estado de Seguridad del Ministerio del Interior sin firmar y se ejecuta sin un protocolo específico acorde con lo previsto en el Reglamento de la Ley de Extranjería sobre los procedimientos de reagrupación o repatriación contemplados en la legislación española, que exige consentimiento de niños y familias, en el primer caso, o defensor judicial e informes en el segundo.

Por si fuera poco la operación en marcha impulsada por un Gobierno que hace nada presumía de impulsar una Ley de Protección a la Infancia, se hace a espaldas de la Fiscalía especializada local y del Área de Menores de la Ciudad.

La instrucción de Interior, fechada el pasado martes y a cuyo contenido íntegro ha tenido acceso Ceutaldia por fuentes ministeriales, dice que "habiéndose recibido escrito de la Delegación del Gobierno en Ceuta, que a su vez nos da traslado del escrito de la Vicepresidencia Primera del Gobierno de Ceuta, rogamos se proceda a ejecutar las previsiones recogidas en el artículo 5 del Acuerdo  entre el Reino de España y el Reino de Marruecos sobre la cooperación en el ámbito  de la prevención de la emigración ilegal de menores no acompañados, su protección y su retorno concertado, hecho en Rabat el 6 de marzo de 2007".

"En base a ello", el departamento que dirige Grande-Marlaska "ruega" que "se proceda a efectuar el retorno de los menores al Reino de Marruecos, respetando en todo momento sus intereses y derechos". Todo ello "con el fin último de garantizar en cada caso las condiciones de reunificación familiar efectiva del menor o su entrega a cargo de una institución de tutela".

Supuestamente el Reino de Marruecos se compromete a "velar por los intereses de los menores, contando en todo momento con la protección otorgada por los responsables locales que supervisan el centro de menores de Martil, cercano a Tetuán".

Rabat también "garantizará los derechos de los menores hasta que sean entregados a sus padres lo antes posible, y en el caso de no existir padres, L’Entraide Nationale se hará cargo de los menores".

Una orden sin firmar y una repatriación sin protocolo


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