La Ciudad pretende mandar a jóvenes migrantes no acompañados a la Península de mano de entidades humanitarias aliviando así los recursos de acogida aún manteniendo su tutela
El conocido religioso padre Ángel se dejó caer por Ceuta este viernes. El motivo de su visita, más allá del mero y evidente drama humanitario que supone la presión migratoria que vive la localidad, se descubrió durante la rueda de prensa en la que compartió micrófonos con el presidente de la ciudad, Juan Vivas. El dirigente político anunció una estrategia de cinco puntos para atajar la enorme sobreocupación -de hasta un 422%- que afecta a los recursos de acogida de menores migrantes no acompañados, un asunto que es competencia de la Ciudad. Pues bien, uno de los puntos que incluye el plan municipal es transferir la guarda de algunos de estos chavales a entidades humanitarias, es decir, ONG, para que estas los lleven a sus instalaciones en regiones varias de la Península.
La fórmula supone que la Administración local mantenga la tutela de los niños y adolescentes, pero estos pueden salir de Ceuta, siempre y cuando las comunidades de destino den el visto bueno.
El padre Ángel dio su visto bueno a esta vía durante la rueda de prensa compartida con Vivas este mediodía. Lo hizo reconociendo incluso que algunos casos podrían vincularse a su entidad, Mensajeros de la Paz.
La intervención ante los medios sirvió para que Vivas elogiara la figura del religioso, del que dijo, "es un referente", celebrando su presencia en Ceuta: "Es una persona sensible con este fenómeno", agregó.
Por su parte, Ángel defendió insistentemente la postura del Papa Francisco, su "secretario general", quien, según recordó, afeó la actuación política y social en crisis humanitarias vividas en Lampedusa (Italia) y que también resaltó la inmigración, a los pocos días de tomar el cargo, como uno de los principales dramas de la sociedad.
También felicitó al pueblo de Ceuta por su actitud acogedora y criticó a quienes buscan extender el odio empleando términos peyorativos para referirse a los menores migrantes no acompañados.
Hizo por último fuerza para apoyar a la Ciudad en otra de sus aspiraciones, que el Estado pueda ceder temporalmente algunas de las instalaciones de las que dispone en Ceuta, de manera que se puedan incorporar a la nómina de espacios destinados a dar cobijo a los jóvenes. "Es una pena lo de esos locales semivacíos, hay un montón", subrayó.