Tras muchos años prometiéndola, tras muchos programas electorales en los que tenía su capítulo propio, la consejera de Presidencia, Mabel Deu, ha anunciado este viernes a sus compañeros del Consejo de Gobierno que la pista de atletismo, encomendada como tantas otros proyectos a Tragsa, comenzará a construirse “en semanas”. El proyecto está presupuestado en 5,3 millones de euros y tendrá un plazo de ejecución de 18 meses desde el inicio de los trabajos.

El portavoz del Gobierno, Jacob Hachuel, se ha congratulado por la noticia, aunque admite que es “una aspiración que viene de antiguo” y en la se ha tardado “demasiado”. La dificultad ha estribado, explicaba Hachuel, en encontrar una parcela de al menos una hectárea en la que poder albergar este tipo de instalaciones.

La nueva pista tendrá una cuerda de 400 metros y seis calles, lo que permite campeonatos  de carácter nacional y ofrecerá la oportunidad de entrenamientos a particulares y centros educativos, así como su uso militar al tratarse de una concesión demanial, Las instalaciones, que contarán con graderío, estarán insertas en la base Teniente Ruiz y tendrán un uso compartido cívico militar.