El candidato del PSOE a la Presidencia de la Ciudad, Manuel Hernández, ha abierto este sábado la precampaña de las autonómicas de mayo ante el 'número 2' de Ferraz, José Luis Ábalos, y las alrededor de 150 personas que han abarrotado un salón del Parador con un mensaje claro, el de que Ceuta puede cambiar de rumbo político y él se ofrece para ser su timonel en aras de la "igualdad" y la "justicia social".

En el transcurso de su largo discurso, Hernández, que vive su propio calvario interno enfrentado a la Delegacióin del Gobierno, ha adelantado algunas de sus intenciones si llega a gobernar la Ciudad. Crearía una Consejería de Igualdad que no fuera "la última de la fila", destinaría un millón de euros a reforzar las ayudas dirigida a los jóvenes para poder acceder a una vivienda y emanciparse y activaría un Plan de Empleo dedicado exclusivamente a ese sector de la población caballa.

El líder socialista se ha presentado como la cara de un proyecto "valiente, responsable e integrador". "Es ahora nuestro momento", ha insistido una y otra vez Hernández, que ha asegurado no ser víctima de ningún arranque ególatra y se ha comprometido a luchar "con uñas y dientes" por presidir el Ejecutivo autonómico.

"Me mueve", ha advertido, "la lucha por la justicia social y me voy a dejar la piel no por ambiciones personales sino porque Ceuta lleva años estancada y se merece prosperidad, pero el PP nos ha condenado a perder el tiempo".

Hernández se ha esforzado por darle a su discurso un marcado carácter feminista e integrador pero también reivindicativo. "No os extrañe", ha alertado, "que tengamos que salir a la calle a defender los derechos de nuestros hijos" frente al despertar de los "fascismos". "España camina cuando los socialistas gobernamos y aquí tienen todo hecho un erial, desde Santa Catalina hasta la Estación de Ferrocarril pasando por las barriadas abandonadas", ha ejemplificado.

Entre las nuevas políticas que al líder socialista le gustaría poner en marcha si de él dependiera estaría un plan de retorno de los jóvenes caballas emigrados por falta de oportunidades en su tierra, pero también la construcción de centros educativos y de centros de día que favorezcan la conciliación de la vida laboral y familiar y la atención integral a los mayores.

En resumen, Hernández ha abogado por construir una ciudad "abierta, europeísta, comprometida y de vanguardia", así como por "defender la alegría", en un claro guiño a los tiempos de Zapatero, y porque los socialistas salgan "a vencer y, sobre todo, a convencer", a "hacer Historia".