El PSOE de Ceuta exige al Gobierno de Vivas que solucione los problemas de pago que se vienen produciendo de manera reiterada con la Fundación SAMU y que está provocando “que las consecuencias las estén pagando los trabajadores de esta fundación que están sufriendo las demoras en el cobro de sus salarios”, manifiesta el secretario general de los socialistas ceutíes, Juan Gutiérrez.

El representante socialista no alcanza a comprender, "destacando y respetando el gran trabajo que realizan los trabajadores del departamento de Intervención", como el responsable del mismo, el interventor habilitado, José Luis Caminero, “mantiene paralizada a la ciudad con el retraso en los pagos y provocando problemas a los proveedores de servicios, en este caso la Fundación SAMU, lo que tiene como consecuencia que los trabajadores de la misma no reciban sus salarios y quebrando las economías de la familias de los mismos” .

“No es comprensible que el interventor habilitado, como responsable de este departamento de la Ciudad ponga tantos palos en la rueda y tantas dificultades a la hora de abonar las cantidades que se adeudan a SAMU”, que ha llegado a sumar cinco certificaciones mensuales por distintos reparos.

A este respecto, Gutiérrez destaca que al margen de los problemas que se les crea a los trabajadores por los impagos, la institución se ve perjudicada con la actuación del responsable de Intervención, “y para ello solo basta con comprobar las cantidades millonarias que la Ciudad se ve obligada a pagar, en concepto de intereses de demora, por no abonar en su tiempo los trabajos que encarga”, dice el socialista.

“Es lamentable ver como los trabajadores no les queda más remedio que tener que llevar a cabo jornadas de protestas para reclamar el pago de los salarios que les corresponde por sus trabajos realizados”.

Los trabajadores se quejan que llevan varios meses cobrando sus remuneraciones fuera de plazo y a día de hoy aún no han percibido los salarios correspondientes al mes de agosto, “una cuestión que no se puede tolerar”, concluye Gutiérrez.