Cuando en la medianoche del próximo lunes pase el primer ciudadano marroquí por la frontera del Tarajal, deberá hacerlo con dos pasaportes. El de su país, con su correspondiente visado para entrar en la ciudad autónoma, y el que acredite que tiene la pauta completa de la vacuna frente a la covid-19. 

Todos aquellos que carezcan de permiso de residencia o circulación en el espacio europeo tendrán que esperar. Unos, los trabajadores transfronterizos, hasta el 31 de mayo, cuando podrán acceder a la ciudad para regularizar sus permisos de trabajo. El resto, esto es, los resientes en la provincia de Tetuán, hasta ahora amparados por la excepción al acervo Schengen, de momento, no tienen fecha y deberán esperar a la evolución de las negociaciones entre España y Marruecos para saberlo.

Así lo confirma el Ministerio del Interior que precisa que desde las 00:00 horas del 17 de mayo solo podrán acceder a Ceuta “quienes reúnen los requisitos exigibles para trasladarse al resto del espacio Schengen”. O como ya dijera el ministro de Interior Fernando Grande-Marlaska, "se ha acordado que en un primer momento, ese libre acceso de ambulación abierta en las fronteras lo sea para los residentes Schengen, aquellos que puedan transitar, permanecer o tengan su residencia en territorio Schengen y a partir del 31 de mayo se amplia el colectivo al conjunto de trabajadores transfronterizos”.

No podrán pasar por tanto libremente los residentes en la provincia de Tetuán, lo que, de facto, elimina la conocida como excepción Schengen que permitía a los residentes en las localidades marroquíes cercanas a la frontera entera en la ciudad autónoma sin visado. Y eso que en un primer momento, Marlaska al ser preguntado por los medios por "las localidades marroquíes cercanas a Ceuta" respondía que "quedaba como estaba". Una respuesta ambigua, pues inmediatamente después insistió en que solo residentes Schengen o con permiso de circulación o residencia, que había generado dudas en Ceuta. Pero no. Al menos durante los primeros 14 días, el Tarajal funcionará como una frontera Schengen, con necesidad de visado. Al menos hasta el 31 de mayo, cuando empiecen a transitar también los trabajadores transfronterizos con su documentación en regla y el consiguiente contrato. 

El resto, los residentes en la provincia de Tetuán sin visado, deberán esperar a la evolución de las negociaciones entre ambos países. Marlaska aseguró este jueves que España y Marruecos “siguen trabajando en el sentido relativo al resto de categorías de personas susceptibles d transitar libremente por las fronteras y la mercancías”. “Dentro de este proceso de reapertura  gradual de las fronteras terrestres con Marruecos, los grupos de trabajo hispano-marroquíes determinarán las siguientes categorías de personas y mercancías que en el futuro podrán acceder a Ceuta y Melilla a través de la frontera con Marruecos”, precisan a Ceuta al Día desde Interior.

A este control de pasaportes habrá que sumarle uno más, el del certificado de vacunación covid o certificado de recuperación equivalente. Un chequeo que justo a la asistencia sanitaria prestará Cruz Roja en el Tarajal con un primer filtro para corroborar los pasaportes covid.