El Pleno de la Asamblea ha dado el sí a una propuesta del PSOE que persigue impulsar las políticas e iniciativas públicas y privadas para avanzar en la igualdad de las mujeres respecto a los hombres. Sólo los dos diputados presentes de VOX en la sesión han emitido su voto en contra.

El debate ha mantenido un tono más o menos templado a pesar de que el asunto es uno de los que suele explotar el portavoz de VOX, Carlos Verdejo para verter sus provocaciones. Lo ha intentado. Como durante toda la sesión se ha referido a la vicepresidenta del Gobierno, Cristina Pérez, como “señora vicepresidente”, a pesar de que la Real Academia Español, que no es precisamente la vanguardia en el uso de lenguaje inclusivo reconoce la forma femenina, con lo cuál ha incurrido en una discordancia gramatical constante durante toda la sesión. Por cierto que cuando el portavoz de VOX la descalifica de Okupa, sí usa la forma femenina: “vicepresidenta okupa”, le ha vuelto a decir en reiteradas ocasiones este martes a Pérez, al mando de la sesión este martes por la ausencia por covid de Vivas. Verdejo no ha dudado también en confundir (imposible saber si ha sido voluntario o no) el apellido de la diputada socialista que ha defendido la propuesta, Samia Abdelkader Maimon, a la que ha llamado Hamed. Este hecho se lo ha afeado el diputado de Ceuta Ya!, Mohamed Mustafa, quien ha señalado que su error busca una vez más la “deshumanización” de una compañera de bancada, de la que ha afirmado “sentirse profundamente orgulloso” al igual que del resto de las mujeres que forman parte de la corporación municipal.

Verdejo ha acudido a los lugares comunes de su discurso en esta materia, acusando al PSOE de querer “favorecer chiringuitos”, de “ideología radical femenista” y tirando de lugares comunes de difícil sustentación estadística, como que un hombre al que acusen de violencia machista un viernes no sale del calabozo hasta el lunes o dando por sentado que el 80 por ciento de los juicios por violencia machista que no logran sentencia favorable son de facto denuncias falsas e incluso dando a entender que entre los que sí logran la condena del agresor (sin presunto dada la sentencia) los hay equivocados y que son inocentes. Obviamente sin prueba alguna.

La realidad se la ha recordado la diputada de MDyC, Fátima Hamed, las condenas por denuncias falsas no llegan al 0,01 por ciento sobre el total de casos de violencia machista denunciados ante los juzgados. Hamed le ha pedido que hable con la policía para salir de la creencia de la presencia en el calabozo de viernes a lunes de denunciados por este asunto y le ha aclarado que pasan a disposición judicial en un día.

¿En contra de qué ha votado VOX? La parte dispositiva de la propuesta socialista, que llega ahora, pero que en realidad se presentó al hilo del Día Internacional Contra la Violencia de Género, 25 de noviembre, es la que sigue:

"Ratificar el compromiso firme de la Ciudad Autónoma con los derechos de las mujeres, la erradicación de cualquier tipo de violencia machista y combatir cualquier discurso negacionista y posicionamiento político que niegue de la violencia de género o rechace las políticas públicas enfocadas a su total erradicación. 

Impulsar y/o reforzar las medidas contenidas en la Ley Orgánica 1/2004, de 28 de diciembre, de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Género y en el Pacto de Estado contra la Violencia de Género en el marco de las competencias de la Ciudad Autónoma, así como su seguimiento 

Instar al Gobierno de España a la actualización y renovación del Pacto de  Estado contra la Violencia de Género en Cortes Generales para buscar el mayor consenso político y social. 

Dotar de los recursos económicos y agentes especializados los instrumentos  de lucha contra todas las formas de violencia contra las mujeres. 

Instar al Gobierno de España a mejorar la coordinación institucional para garantizar que los Fondos del Pacto de Estado contra la Violencia de Género se implementen de la manera más óptima. 

Impulsar en el marco de las competencias de la Ciudad Autónoma que las  políticas públicas en materia de servicios sociales, sanidad, seguridad e igualdad tengan también como objetivo la abolición de la prostitución. 

Instar al Gobierno de España a impulsar un marco normativo orientado a la  abolición de la prostitución. 

Colaborar con las asociaciones de la sociedad civil que luchan contra la violencia machista y trabajan por la igualdad de hombres y mujeres. 

Rechazar todas las formas de violencia contra las mujeres y manifestar nuestro compromiso con las víctimas".