El presidente de la Ciudad, Juan Vivas, ha abierto este lunes a mediodía un "periodo de reflexión" sobre cómo encauzar la vida parlamentaria de la Asamblea, que ha quedado suspendida sine die salvo en lo tocante a asuntos "fundamentales" para el normal funcionamiento de la institución como la aprobación de las cuentas de las sociedades municipales o del expediente de modificación del Presupuesto para atender las consecuencias de la crisis sanitaria, económica y migratoria de mediados de mayo.

Vivas ha decidido poner pie en pared ante Vox, que aprovecha cualquier intervención para tachar a parte de la Asamblea de "traidores a la patria" y de "promarroquíes". Se trata, opina el presidente, de una "línea roja" que no es aceptable "en ningún momento", pero menos ahora, cuando la ciudad atraviesa "uno de los momentos más difíciles de su historia que exige que todos pongamos nuestro interés en atender esta contingencia para salir cuanto antes de una situación que todos hemos calificado de insostenible y para sentar las bases de un futuro más sólido, estable y seguro".

No ayuda, a su juicio, tener un Grupo dedicado a "dar pábulo a las tesis de Marruecos". "Nos vamos a reunir con los Grupos individual y conjuntamente para concretar lo que se debe y no se debe decir en este Pleno, donde no se pueden verter acusaciones de traición a la patria sin aportar ni una sola prueba", ha advertido.

"Todos hemos jurado la Constitución, fidelidad y lealtad a España y a Ceuta, ese es el discurso que hay que trasladar al resto de España y Europa y a Marruecos, que habla de una ciudad ocupada con una población dividida en la que equipara a musulmanes con marroquíes. No podemos darle pábulo a eso. No ofenden sólo a los acusados, es un daño a toda Ceuta y a España", ha alertado.

Vivas ha ofrecido su propia cabeza política si es la pieza que Vox exige para dejar de boicotear el normal funcionamiento de los Plenos. "Si se cuestiona algo tan básico como que todos defendemos nuestra españolidad le estamos haciendo un favor a quien pretende dividir a la sociedad ceutí: en esta Asamblea todos somos y no sentimos españoles, algo que no depende de la cultura, de la religión o la ideología. Uno puede ser conservador, liberal, de derechas, de izquierdas o de centro, pero eso no tiene nada que ver con que uno se sienta español", ha distinguido.

Según Vivas, "la sociedad sabrá distinguir quiénes son los generadores de la tensión" y él se ha limitado a pedir "responsabilidad" a todos. "Nuestra fortaleza en estos momentos tan difíciles está en la unidad y nadie está legitimado para ponerla en tela de juicio, pero en este momento de reflexión cabe todo: a lo mejor yo no soy capaz de mantener el orden en la Asamblea y si se trata de que yo lo asuma y dé un paso a un lado para que aquí se defienda y proteja la unidad en la defensa de la españolidad, estoy dispuesto", ha ofrecido.

Para el presidente de la Ciudad "ahora es el momento de la responsabilidad, de la altura de miras, de la unidad, de la lealtad institucional y de olvidarnos de cálculos electorales". "Hay que establecer líneas rojas como no utilizar el ejercicio democrático de la llibertad de expresión para insultar a otros y no debilitar nuestra unidad en la defensa de nuestra españolidad o la convivencia.... Si no se respetan habrá que tener respuestas políticas porque se puede criticar todo, pero no minar los pilares de la ciudad trayendo a esta Asamblea las tesis de Marruecos", ha zanjado.