Vivas ha recibido este martes en la Presidencia de la Ciudad a última hora de la mañana a los empresarios de la avenida Alcalde Sánchez-Prado, el colectivo que según ha denunciado el PSOE está sufriendo con intensidad en sus cuentas de resultados hasta tener que cerrar en algunos casos las obras que se cometen en la Gran Vía.

A la cita han asistido, por el Gobierno de la Ciudad, además de su presidente, el consejero de Fomento, Néstor García, y los directores generales de Presidencia, Manuel Sánchez, y de Fomento, Bharat Bhagwandas. También han acudido responsables de la empresa TRAGSA, encargada de los trabajos, y la dirección de la obra.

En este grupo de trabajo también se integrarán los empresarios, que designarán a cuatro representantes, con los que se analizarán las medidas más adecuadas y se hará un seguimiento de la situación de los negocios afectados.

En la reunión también se ha dado cuenta de que las obras marchan según lo previsto y los representantes de la empresa TRAGSA se han comprometido a intentar agilizar los plazos referidos a la apertura al tráfico rodado de la avenida y a la reposición de solería y acerado, por ser los dos aspectos con mayor incidencia en la actividad económica de estos negocios.

El secretario general del PSOE de Ceuta, Manuel Hernández, se hizo eco el sábado del "malestar" que, según denunció, existe entre "comerciantes, hosteleros y profesionales independientes establecidos en la Gran Vía" por "los vaivenes de las obras que allí se están llevando a cabo, que les están perjudicando de forma muy importante y grave en sus negocios".

Según los socialistas, porque "son unas obras innecesarias teniendo en cuenta que hay muchos lugares de la periferia que, como venimos demostrando en nuestras constantes visitas a las barriadas, se encuentran en condiciones de total abandono que deberían ser objetivo preferente del Gobierno de Vivas”.

"Los propios comerciantes nos han trasladado que han perdido hasta un 70% de sus ventas, que han cerrado ya dos establecimientos y que los bares y cafeterías son los que más están sufriendo las consecuencias, ya que no se sientan clientes en las menguadas terrazas existentes”, advirtieron desde Daoiz.