La Operación Paso del Estrecho llega a su fin. El comité asesor de esta (conformado, entre otros, por representantes del Ejecutivo local, Delegación del Gobierno y Autoridad Portuaria) prepara ya, de cara a la "anhelada" fase retorno, uno de los mayores operativos ejecutados hasta el día de hoy (si no el mayor).

Hace pocas fechas, el mencionado comité ordenó la realización de una suerte de "ejercicio práctico" de cara, precisamente, a preparar el que -salvo sorpresa- sería el último de los desplazamientos en masa del presente año: el de este fin de semana. Así las cosas, las autoridades acordaron acondicionar la explanada del muelle de Poniente para dar cabida a los miles de vehículos que, se espera, pasen por Ceuta en dirección a la península.

Durante la jornada de ayer, efectivos de Policía Nacional y Guardia Civil desplegados en El Tarajal dieron parte de cientos de automóviles que, provenientes de Marruecos, ponían rumbo al puerto. A pesar del incesante goteo de entradas, las navieras experimentaron retrasos mínimos y la Autoridad Portuaria fue capaz de gestionar las rotaciones con cierta holgura.

Hoy, se espera que el volumen de vehículos sea aún mayor. En este sentido, la ausencia de uno de los buques con mayor aforo de pasajeros (trasladado a la línea de Tánger) se hará notar sobremanera, perdiéndose la capacidad de trasladar la nada desdeñable cifra de 800 vehículos diarios a Algeciras.

Autoridad Portuaria, Capitanía Marítima y Delegación del Gobierno trabajan para tratar de solucionar esto último. Las distintas Administraciones prevén introducir cambios en la gestión de los embarques de la compañía propietaria del navío en cuestión para reducir los tiempos de espera, cosa que, en principio, no afectará a los ceutíes que dispongan de billete cerrado y accedan al puerto a través del carril habilitado para residentes.