Toreros, ganaderos y empresarios muestran su indignación contra el «atentado» a la Fiesta y las libertades, pero confían que en abril, por primavera, cesen los nubarrones y triunfe «el respeto y el sentido común».
Pedro Balañá (propietario de la Monumental): «Si la prohibición sigue adelante, lamentaría la limitación a la libertad de las personas que mantienen y sienten esta tradición, una de las que tienen mayor arraigo en Barcelona y en Cataluña. Respeto a todas las sensibilidades y a la institución que tomará la decisión».
El Viti (torero): «Es catastrófico que algunos políticos se dediq...