Es cierto que a finales del pasado año se sentaron las bases de lo que parecía una nueva tendencia en el mercado hipotecario. Algunas entidades empezaron a mover ficha lanzando ofertas de créditos para adquisición de vivienda algo más baratos de lo que, hasta entonces, era lo habitual (a mediados de 2013, el diferencial medio sobre euríbor se situaba en torno al 3%). Bankinter, con su Hipotica (euríbor más 1,95% a partir del segundo año en caso de máxima vinculación); Caja Sur, con un tipo de interés inicial durante 24 meses del 2,5%; para el resto de los años, euríbor más un diferencial de un mínimo del 1,25%; Caja Rioja, que para los jóvenes aplica un tipo de interés anual inicial del 1,25%; el resto de los años, el diferencial sobre euríbor puede llegar a ser del 0,95%...

La realidad es que ha sido precisamente esta semana, con la entrada del Santander en escena, cuando se ha empezado a hablar de una posible "nueva guerra hipotecaria". La entidad presidida por Botín anuncia (campaña televisiva incluida) su nueva Hipoteca Santander: primer año, tipo de interés del 2,95%: resto de años: euríbor + 1,99% si se domicilia la nómina/pensión (2.500 euros mínimo al mes conjunto de titulares), hasta 9 recibos trimestrales; se contrate tarjetas de crédito y/o débito (con consumo mínimo 500 euros al trimestre)... En caso de no cumplir condiciones, el diferencial será del 2,99%. La oferta es, por el momento, válida hasta el próximo 30 de abril.

No es la única entidad en liza. Kutxabank ha decidido entrar de lleno en las hipotecas a tipo fijo. Ofrece la posibilidad de contratar un tipo de interés fijo a 20 años, desde el 5,24% hasta el 3,89%, para quienes tengan la nómina domiciliadas y contraten tarjetas, seguros y planes de pensiones. La comisión de apertura es del 0,25%. La entidad también ha lanzado Un Año en Blanco que permite no realizar ningún pago de las cuotas del préstamo hipotecario durante el primer año.