El Partido Popular ha celebrado su Convención Nacional en Sevilla durante este fin de semana. Aprovecha el vacío informativo que generan estos días para conseguir algunos minutos más en los medios de comunicación vendiendo la nada.

Dos millones de euros le ha costado al PP la Convención para terminar concluyendo que van a contradecirse y van a pensarse lo de las pensiones de los parlamentarios, que hace un mes votaron mantener igual.

Suele ser normal que los partidos de la oposición no se comprometen con demasiadas cosas a tantos meses de la campaña porque pueden espantar a parte de sus votantes y perder posibilidades electorales, pues en el mundo real las medidas que benefician a unos y perjudican a otros.

Lo único que ha anunciado Rajoy de sus intenciones hasta ahora ha sido que tardaría tres meses en elaborar un Plan Económico y que una vez presentado pediría a todos que asumieran grandes sacrificios. Cuando un político de la derecha habla de todos quiere decir que la carga será inversamente proporcional a la capacidad económica y que serán los más débiles los que paguen la salvación de los más pudientes.

Entre planes económicos anunciados y no esbozados y demasiados silencios el PP está dando una imagen contraria a la confianza que dice que representa. Su estrategia de no moverse durante más de un año está generando tantas dudas, y dudas con fundamento, que está evidenciando que al PP lo único que le interese es el mero ejercicio del poder y que los intereses de España y de los españoles les traen sin cuidado.

Pudiera el PP celebrar convencionales nacionales todos los fines de semana que si alguien aparece allí con una idea que debatir, con una propuesta, será echado él y la idea tanto de la sala como del partido. En el PP, cuando está en la oposición, está prohibido tener ideas y, cuando está en el gobierno, las ideas ya las dan la CEOE y la Iglesia Católica.

Posted originally: 2011-01-22 19:35:50