Unas arcas municipales en la «ruina» fruto de muchos años de un gasto «desorbitado» es la difícil situación a la que debe hacer frente el Ayuntamiento de León. La deuda, heredada de la gestión del anterior equipo de Gobierno formado por el PSOE y la Unión del Pueblo Leonés, asciende a 432 millones de euros. Una cantidad que el alcalde, Emilio Gutiérrez (PP), considera «inmensa» y que obliga al consistorio a debatirse «en la supervivencia de cada día». Tanto es así que asegura que hoy por hoy «León es un monstruo, una máquina que consume mucho más de lo que produce» o de los ingresos que genera...