Las reuniones entre el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y el enviado especial de EE.UU, George Mitchell, para intentar resucitar el proceso de paz parecen ser todo menos fáciles. Y no sólo por el delicado debate que se traen entre manos. Sus agendas, y señalan los analistas que sus persistentes diferencias, empiezan a convertir sus encuentros en desencuentros.
Por tercera vez desde mayo, una cita programada entre ambos para hoy era aplazada, previsiblemente a mañana. Esta vez la decisión partía del jefe del Gobierno judío, que por la mañana asistía en el kibutz Nahalal al funeral ...
Posted originally: 2009-09-14 02:00:00