¿Alguien recuerda aquello de "puedo ver Rusia desde mi casa"? Sarah Palin de Alaska sigue viva, aunque haya hecho mutis por el foro de la política estadounidense, y se haya refugiado en su nueva mansión de Arizona. Pero ahora en temporada electoral, cuando en Estados Unidos vuelven a aflorar las pancartas y las chapas partidistas, y cuando regresa la primavera de primarias, cáucuses y convenciones, la exgobernadora de Alaska vuelve a escena. No exactamente ella. Más bien se trata de la interpretación que de ella hace Julianne Moore.