La Organización para la Cooperación y el Desarrollo (OCDE) calcula que la recesión en España se prolongará a lo largo de 2013, cuando espera una caída del Producto Interior Bruto (PIB) del 0,8%. Este dato contrasta con las cifras que maneja el Gobierno, que confía en que la economía española se recupere durante el próximo año con un repunte del 0,2%. Para el presente ejercicio, sin embargo las proyecciones de la OCDE, el conocido como Club de los países ricos, son mejores que las del Ejecutivo, ya que augura una contracción del 1,6% mientras el Gobierno asume una caída del 1,7%.

La OCDE vincula este mayor deterioro en que la crisis del euro se ha tornado "más seria", según afirma en el informe presentado esta mañana con las previsiones sobre sus Estados miembros. En este apartado también advierte de que las turbulencias, que se traducen en una caída del PIB de la eurozona del 0,1% en 2102 cuando hasta ahora esperaba un tímido avance del 0,2%, pueden acabar afectando a la economía internacional. La cifra publicada hoy sobre el PIB del conjunto de los países que comparten la divisa europea contrasta con el crecimiento del 0,6% que sostenía en noviembre. Para 2013 calcula una recuperación del 0,9% en lugar del 1,7% de hace seis meses.

Para poner fin a los problemas derivados de la crisis de deuda, la organización respalda las tesis que abogan por que el BCE vuelva a poner en marcha su programa de compra de bonos para ayudar a los países que, como España, sufren presiones en los mercados. Esta iniciativa lleva ya 10 semanas suspendida.

Las perspectivas de la OCDE sobre el mercado laboral español tampoco son nada halagüeñas. El persistente deterioro económico elevará la tasa de paro del 24,5% de 2012 al 25,3%, más de un punto sobre las proyecciones del Gobierno. Mientras, sobre el déficit, también arroja un jarro de agua fría sobre las cifras incluidas en el cuadro macro del Gabinete de Mariano Rajoy, ya que la organización de los países desarrollados vaticina que no se alcanzará por tres décimas el objetivo de reducir el desfase presupuestario de España al 3% al final del próximo año.

Para este año también sus cálculos sobre déficit son más optimistas, ya que confía en que baje al 5,4%, una décima por encima de la meta impuesta por Bruselas al Ejecutivo. En este apartado, sin embargo, la OCDE no recoge la reciente revisión al alza del Gobierno sobre la cifra de 2011, que ha pasado del 8,5% al 8,9%.

Las previsiones que ha publicado hoy la OCDE son más pesimistas que las que han dado a conocer en las últimas semanas la Comisión Europea o el Fondo Monetario Internacional, que es el único que coincide con el Gobierno en mantener la recuperación en 2013. Los servicios privados de estudios, sin embargo, también apuestan por que el PIB de España prolongará las tasas negativas de crecimiento durante el año que viene.