Menos manifiestos, menos debates teóricos en las redes sociales y más compromiso diario con el oficio. Xosé Manuel Pereiro, reelegido ayer decano del Colexio de Xornalistas, pidió hacer que los profesionales hagan “examen de conciencia” para ver si están proporcionando “argumentos para el debate o munición para el combate” a la sociedad , antes de “quejarse por la incomprensión de la ciudadanía”.

Pereiro recurrió a su discurso de hace cuatro años cuando accedió al cargo y recordó que si entonces ya había advertido “el mal síntoma de que el periodista fuese noticia”, ahora la profesión que estaba al borde del abismo, ha dado un paso al frente.

Tras admitir que sobran clasificaciones que situan a la profesión entre las más denostadas, lanzó esta advertencia a los periodistas: “En vez de participar con entusiasmo en análisis como el de la supervivencia de soportes o el de cambio de modelos, deberíamos asumir algunas verdades modestas e igual de necesarias. Estamos como estamos, pero los periodistas tenemos mucha más capacidad de adaptación que la mayoría de las profesiones y mucha más capacidad de influir en su rumbo”. Su discurso no rehuyó la autocrítica y recordó que “un periodista dócil es un mal periodista o un periodista desaprovechado”.

Entre los consejos que brindó su intervención está el de abandonar las mal llamadas ruedas de prensa sin preguntas en lugar de lamentar su existencia en las redes sociales.

Pereiro, colaborador de este diario, fue reelegido decano de una junta directiva en la también estará Rosa Aneiros, como vicedecana, Marcos Sanluis (secretario) y Darío Janeiro (tesorero). En el organigrama también figuran como vocales, Rita Alonso, Pilar Piñeiro, Francisco López, Belen Regueira, Mónica Ares, Xosé Manuel Rodríguez Durán y Francisco González. En la toma de posesión estuvieron presentes el secretario general de Medios de la Xunta, Alfonso Cabaleiro, y el decano de la Facultad de Xornalismo, Xosé Peira, además de la vicesecretaria del Parlamento, Carme Adán, del BNG.