El régimen libio ha anunciado en un tono entre amenazante y condescendiente que estudia retirarse de Misrata para que las tribus locales lideren la lucha contra los rebeldes. "Si el Ejército no puede resolver el problema por los bombardeos de la OTAN, entonces la población de la región entrará", ha dicho a los periodistas el viceministro de Exteriores, Khaled Kaim.