Telefónica quiere quedarse con la operadora de telefonía móvil brasileña Vivo. La española pretende comprar a
Portugal Telecom (PT) el 50% de las acciones que le faltan para hacerse con el control de Brasicel, la compañía holandesa a la que pertenece el 60% de Vivo (la mayor operadora de móviles brasileña) y de la que la española ya posee la mitad. Y para ello ha ofrecido a la compañía lusa más el doble del
valor de Vivo. "Es una prima muy superior al valor de mercado de la compañía; una prima del 145%", aseguran desde Telefónica a la agencia EFE.