A pesar del descenso en la incidencia en vertical, las previsiones apuntan a que el pico de hospitalizaciones no se ha alcanzado aún. Parece que tampoco el de fallecimientos. La covid se ha cobrado la vida de otro hombre de 61 años este sábado, según se recoge en el informe de Medicina Preventiva del Ingesa. 

El hombre no estaba vacunado y no era además la primera vez que contraía la enfermedad, según se recoge en el informe. Se encontraba ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos.

La tragedia viene a amargar un dato que parece bueno, previsiblemente cuando se hagan oficiales por parte de Sanidad el balance de nuevos casos detectados durante la jornada del sábado se bajará de los 100 nuevos positivos, algo que no sucedía hacía semanas.

La curva de incidencia sigue su descenso acelerado, “en vertical”, similar a lo que ya ocurrió en Sudáfrica y a lo que sucedió a la inversa a partir de diciembre en Ceuta.

Y una novedad, el final de las cuarentenas y aislamientos puede estar más cerca por la propia evolución del virus. Según se apunta en el informe de Preventiva: “Estudios recientes nos indican que alrededor del 50 por ciento de los casos contagiados con la nueva variante Ómicron lo han podido ser por casos primarios presintomáticos, lo que reduce la efectividad de las cuarentenas y aislamientos, que aunque deben seguirse realizando en pacientes sintomáticos (como en cualquier otra enfermedad infecciosa con similar vía de transmisión por el tiempo que correspondiese) y también para contactos estrechos no vacunados y personas vulnerables; por lo que su reducción deberá plantearse pronto, aunque el periodo de incubación siga siendo igual y la mediana del mismo, 5 días”.