INNOVACIÓN

El Hospital comienza a aplicar una innovadora y efectiva técnica para combatir la hiperplasia benigna de próstata

El Hospital comienza a aplicar una innovadora y efectiva técnica para combatir la hiperplasia benigna de próstata
Una persona, frente al Hospital Universitario
Una persona, frente al Hospital Universitario

Se trata de la 'i-TIND', un procedimiento de no más de 5 minutos de duración que revierte muy positivamente en la calidad de vida de los pacientes


El servicio de Urología del Hospital Universitario de Ceuta ha comenzado a implementar la técnica 'i-TIND' para mejorar los trastornos obstructivos urinarios causados por la hiperplasia benigna de próstata. Los problemas para orinar y la repercusión en la calidad de vida son dos de los efectos de la dolencia, que constituye un trastorno muy frecuente en los hombres. De hecho, este afecta a la mitad de los varones de entre 50 y 60 años y al 90% de los mayores de 80.

Vicente Diéguez, urólogo del HUCE, asegura que "la hiperplasia benigna de próstata no es grave, pero sí limita al paciente, debido a que la glándula prostática aumenta de tamaño y esto, a su vez, hace que la uretra se comprima": es decir, "la próstata tiene un tamaño normal de unos 20-25 gramos, pero si esta aumenta de tamaño llegando hasta los 30-40 o, incluso, los 60 gramos, este dispositivo puede ser la solución para aquellos pacientes que padezcan problemas prostáticos".

Los síntomas para poder identificar el crecimiento prostático, según Diéguez, son "un chorro de orina bajo, comenzar a empujar para poder miccionar, retención aguda de orina y levantarse con frecuencia de madrugada a miccionar".

El doctor asegura que la técnica 'i-TIND' "se distingue de otras técnicas, como la cirugía, en que es capaz de preservar la eyaculación, ya que, tras la operación, los pacientes suelen presentar problemas para eyacular".

¿Qué es la técnica i-TIND?

Se trata de una operación por la que se introduce un dispositivo en la uretra prostática. La intervención dura unos 4-5 minutos y se retira a la semana de instalarse. "Es un avance, ya que no requiere anestesia general, mantiene intacta la próstata y ayuda a conservar la función sexual de los pacientes", asegura Diéguez.

En la misma línea, este dispositivo restaura la micción y evita la medicación. Con este aparato, son hasta seis los años en los que el paciente puede miccionar sin necesidad de llevar a cabo métodos invasivos.

El Hospital comienza a aplicar una innovadora y efectiva técnica para combatir la hiperplasia benigna de próstata


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