Durante varias semanas, el Sindicato Médico de Ceuta ha venido reclamando una mejora de “las indignantes condiciones laborales que se presentaban en la bolsa de empleo del Ingesa para algunos de los colectivos recogidos en ella, protesta a la que se ha sumado el servicio de enfermería, “vapuleado y humillado también por estas condiciones”. Hoy lo han hecho de nuevo a las puertas del Hospital Universitario de ceuta para exigir a Ingesa “una mesa de diálogo en la que afrontar las desigualdades manifiestas de la bolsa de empleo y cambiar urgentemente las condiciones para ofrecer un trato equitativo a todos los profesionales”.

“No podemos permitir que continúen aprovechándose de los profesionales que están dejándose la salud, literalmente, para conseguir que nuestra ciudadanía salga lo antes posible de una catástrofe sanitaria como la que estamos atravesando.”, reivindican. “Los sanitarios decimos basta. No vamos a tolerar que se siga ejerciendo una actitud pasiva ante las injusticias. Nuestra intención ha sido siempre la de ofrecer alternativas y medidas para conseguir avanzar juntos. No obstante, seguimos sin ser escuchados. Por ello, exigimos una mesa de diálogo en la que afrontar las desigualdades manifiestas de la bolsa de empleo y cambiar urgentemente las condiciones para ofrecer un trato equitativo a todos los profesionales de la salud”. 

Estas son las reclamaciones que plantean para conseguir unas condiciones laborales dignas que se ajusten a las del resto de profesionales a nivel nacional. “Los sanitarios tenemos una serie de reivindicaciones que deberían ser escuchadas, ya que esta situación laboral nos parece una vergüenza, teniendo en cuenta el escenario en el que trabajamos y los riesgos que conlleva nuestra profesión”, defienden.

• Que se realice la toma de posesión de plazas del personal sanitario y no sanitario antes de la apertura de la nueva bolsa.
• Que no se limite la experiencia profesional a 22 años. Esto es un insulto a la forma de vida que implica trabajar en estos servicios, despreciando la labor exhaustiva que realizamos y devaluando el tiempo real trabajado.
• Que se modifique la bolsa de empleo y se implante una baremación justa para todos los sanitarios, en la que no haya categorías en las que los profesionales vean su tiempo reducido a un tercio por necesidades específicas del lugar donde trabajan. 
• Que se regule la puntuación de la formación de postgrado, con una valoración lógica de los estudios especializados.
• Que disminuya el peso de la aprobación de las oposiciones. Actualmente, aprobar el examen del Ingesa se valora con 10 puntos, lo que se equipara a casi 30 meses trabajados. Entendemos que debe valorarse el esfuerzo de aprobar una oposición, pero también hay que tener en cuenta la experiencia profesional.
• Que se regule la puntuación de las actividades impartidas como docente en universidades u otros organismos ya contemplados en las bases y se eleve el máximo de horas a 150 anuales. 
• Que no se limite la puntuación como tutor clínico, tutor de prácticas o tutor de formación sanitaria especializada, por el perjuicio que ello conllevaría a los futuros alumnos.
• Que se considere la formación como EIR (Enfermero Interno Residente) como tiempo trabajado, pero que se bareme la especialidad con dos puntos.
• Que se valore como un requisito el empadronamiento mínimo de 12 meses para trabajar en Ingesa, evitando los posibles desplazamientos por profesionales que vienen de la Península.
• Que se vuelva a permitir el cambio de interinidad entre Atención Especializada y Primaria.
• Que se elimine el límite de 500 h. de formación al año.

“Únicamente pedimos condiciones laborales que nos permitan conseguir una estabilidad y en las que se reconozca nuestro tiempo invertido”, explican en un comunicado en el que se muestran “dispuestos a dialogar con la Administración, siempre que se escuchen nuestras demandas”.