Ceuta vive un otoño trágico. 42 de las 52 muertes registradas por el nuevo coronavirus COVID-19 desde el inicio de la pandemia tuvieron lugar entre octubre y noviembre. 15 en octubre, 27 en este mes de noviembre que ni siquiera ha acabado. La proporción es terrorífica: el 80 por ciento de las muertes por coronavirus se dieron en los dos últimos meses. Más de la mitad en estas últimas tres semanas.

El goteo de fallecimientos es casi constante, y son ya muchos los días marcados en negro en el calendario de la historia. Fechas como el 5 de noviembre o el 8 y el 22 del mismo mes, cuando se registraron hasta cuatro muertes en un mismo día. Un panorama desolador que Ceuta no vivió en la primera ola de la pandemia,: entre los meses de marzo y abril, Ceuta registró cuatro fallecidos; en el mes de agosto se lamentó un muerto más y en septiembre otras cinco personas fallecidas se sumaron a la cuenta más triste.

Las primeras alarmas de la tragedia que se avecinaba saltaron en la última semana de octubre. Entre el 26 de octubre y el 1 de noviembre se contabilizaron en Ceuta 9 fallecidos. Una semana después, entre el 2 y el 8 de noviembre se contabilizaron 11 más. Muertes que vienen a sumarse a los fallecimientos no relacionados con el nuevo coronavirus, que en esas semanas también experimentaron un notable incremento respecto a años anteriores: en la última semana de octubre, según los datos desglosados por el Instituto Nacional de Estadística, se registraron en Ceuta 21 fallecimientos; en la primera de noviembre, 22.   Solo en el mes de noviembre la ciudad autónoma ha experimentado más de un 20 por ciento de incremento de la mortalidad, porcentaje que se eleva al 100 por 100 en el caso de la última semana de octubre.

A nivel nacional los datos son incluso peores.Las estimaciones del Sistema de Monitorización de la Mortalidad (MoMo) según la media de años anteriores indican que este año lo habitual hubiese sido que fallecieran 68.000 personas entre marzo y abril. Según los últimos datos disponibles, los registros civiles han notificado más de 111.000 muertes por todas las causas durante esos dos meses. 43.000 defunciones por encima de la media histórica.