Este viernes, por vez primera en casi dos años, los últimos datos sobre la evolución de la pandemia no han formado parte del orden del día del Consejo de Gobierno. La ausencia del portavoz titular y consejero de sanidad, Alberto Gaitán, y la decisión adoptada en el Consejo Interterritorial para empezar a tratar la covid-19 como una gripe, esto, es vigilando solo a colectivos vulnerables y estando alerta mediante una Red Centinela, así como crisis de mayor envergadura si cabe, como la guerra de Ucrania, han relegado a la pandemia a un segundo plano. 

Pero la pandemia sigue ahí. Y con niveles de riesgo alto, aún con más de 300 casos por 100.000 habitantes en los últimos 14 días. La curva de contagios ha rebotado para volver a subir, solo levemente, en la última semana. Un paso atrás que se esperaba, así lo adelantaba ya ayer el informe diario del Área de Medicina Preventiva:  “Aumento del número reproductivo en ascenso desde hace nueve días y reaparición del porcentaje de tendencia positivo, que ya estaba en ascenso durante ocho días. Por segundo día consecutivo la IA en los últimos siete días comienza a aumentar, pasando a Riesgo Alto nuevamente”.

 A cambio mejora el escenario asistencial, especialmente en el Hospital Universitario de Ceuta (HUCE) con una estabilización de la ocupación asistencial en cifras de riesgo bajo. La ocupación de críticos pasa a riesgo bajo. 

Pese a todo, el horizonte sigue siendo optimista, aunque haya que seguir mirando la curva de contagios de reojo. “as previsiones siguen siendo buenas, en estabilización o ligero ascenso, pero hay que seguir expectante por el preocupante aumento sostenido del número reproductivo y del porcentaje de tendencia de casos diagnosticados, que podría relacionarse con aumento de la interacción social en las recientes fiestas”