Cuarenta y ocho horas después de la inoculación de las primeras 30 dosis de la vacuna de Pfizer-Biontech contra la COVID-19 entre residentes y personal sociosanitario de la Residencia de Nuestra Señora de África, todos se encuentran "en perfecto estado" y "sin efectos secundarios", según han informado fuentes del Ejecutivo local.

El director del centro, Gonzalo Barredo, y Francisco Fernández Isado, residente de 81 años, se convirtieron el pasado domingo a primera hora de la mañana en los primeros vacunados en la ciudad autónoma de acuerdo con las pautas establecidas en la Estrategia Nacional de Vacunación, que prioriza a ambos colectivos junto a los cuidadores de grandes dependientes no institucionalizados.

El siguiente grupo en recibir la vacuna será "el personal sanitario de primera línea".

La Consejería de Sanidad prevé recibir esta misma semana las siguientes dosis con el objetivo de cumplir los protocolos del Ministerio y vacunar a todo el grupo 1: alrededor de 500 personas entre residentes y personal sociosanitario de las residencias.

Aunque un 34,5% de la población local no está dispuesta a vacunarse “hasta conocer los efectos en otras personas” y un 8,3% es absolutamente reacia a hacerlo, la evidencia científica avala que la vacuna contra la COVID-19 "es necesaria y segura", además de "imprescindible para prevenir la enfermedad, disminuir su gravedad y mortalidad y reducir el impacto de la pandemia sobre el sistema asistencial y la economía".

La vacuna contra la enfermedad del coronavirus goza de "los mismos niveles de seguridad y eficacia que cualquiera de las que se emplean habitualmente" y "cumple con los estándares que se exigen para que su uso sea autorizado" tras superar todos los controles y permisos requeridos por las instituciones europeas y españolas.