El único caso positivo confirmado en Ceuta de la enfermedad del coronavirus de la cepa británica se corresponde con un contagiado que falleció en enero, según han precisado fuentes sanitarias después de que tanto el INGESA como la Ciudad Autónoma eludiesen concretar si el infectado con esa variante era un caso activo.

La Dirección Territorial hizo pública la detección del primer caso de la cepa británica este viernes, al menos dos semanas después del fallecimiento del contagiado, que podría tener "vínculo epidemiológico exterior", algo todavía en estudio.

Los especialistas consultados consideran que el área de bioquímica molecular del Hospital Universitario debería disponer de secuenciación genómica para poder monitorizar de forma más rápida y certera la posible propagación de la variante británica de la COVID-19 en la ciudad autónoma.

El INGESA parece, sin embargo, estar satisfecho con los medios de los que dispone: "Aunque el laboratorio del Hospital Universitario detecta la mutación del virus, la secuenciación solo se realiza en laboratorios muy especializados, por lo que Ceuta está remitiendo las muestras de casos sospechosos de la variante británica al Instituto Carlos III de Madrid", se ha limitado a reseñar en un comunicado.

El Ministerio de Sanidad ha alertado de que “el riesgo de que se produzca un aumento progresivo de hospitalizaciones asociado a la circulación cada vez mayor de la variante es elevado”. Su incidencia “está aumentando rápidamente” y “puede condicionar la tasa de hospitalización y la letalidad en nuestro país en las próximas semanas”.