La incidencia de la pandemia en la ciudad sigue poco a poco reduciéndose y acercándose a abandonar los parámetros que marcan el riesgo extremo en el que sigue instalada Ceuta en los casos acumulados durante los últimos 14 días. Y todo a la espera de ver cómo repercute sobre esta evolución el nuevo brote declarado en el Centro de Menores de la Esperanza. Un sólo brote que ya cuenta con más de 20 casos y que dadas las dimensiones de la ciudad puede echar por tierra la recuperación por sí mismo.

Según los datos publicados este viernes por el Ministerio de Sanidad en las últimas 24 horas, las correspondientes al jueves, se detectaron 14 casos nuevos de covid. Eso eleva el número de casos totales detectados a los 4.562 desde que se inició la pandemia en la ciudad el 14 de marzo del pasado año. Eso deja los casos detectados durante los últimos 14 días en 237 y una incidencia acumulada en dos semanas, medida en casos por cada cien mil habitantes que baja de los 297,25 del jueves a los 279,56 de este viernes. El umbral que marca el riesgo extremo está en los 250 casos.

Previsiblemente el brote en la Esperanza frenará esta agónica reducción de la pandemia y aunque en los próximos días saldrán de la estadística jornadas con nuevas notificaciones de casos detectados por encima de los 20 casos, los detectados en la Esperanza no se habían terminado de afinar este viernes a mediodía cuando ya alcanzaban las dos decenas.

Peor va la incidencia acumulada en los últimos 7 días. Después de jornadas positivas para la evolución de la pandemia con menos de 10 nuevos casos por día y de haber bajado de los 125 casos por cada cien mil habitantes que marcan el riesgo extremo, este viernes los 14 nuevos positivos detectados durante el jueves han elevado por encima de 100 los casos por cada cien mil habitantes en 7 días. En concreto hasta los 101,44. Ayer era de 94,37. Y en casos contantes y sonantes, la última semana se han detectado 86. La mala noticia es que el brote de la Esperanza previsiblemente hará recrecer este parámetro previsiblemente hasta acercarlo mucho a esos 125 casos por cada cien mil habitantes.

Sólo Melilla y Madrid presentan una menor incidencia acumulada en 14 días que la ciudad y además de esas dos autonomías también País Vasco presenta peores resultados en la incidencia acumulada a 7 días. Una situación que en lo más duro de la tercera ola no era así. La Ciudad se mantenía por debajo de la media en la incidencia acumulada y sólo la mejoraban entre 6 y 8 regiones. Pero mientras en el resto se han dado mejoras sustanciales en la incidencia, la ciudad ha ido rebajando la misma de forma muy paulatina. Así ahora en ambos parámetros la incidencia de covid en la ciudad está por encima de la media nacional que se sitúa para dos semanas en 193,91 casos por cada cien mil habitantes y en 7 días en 77,23 casos por cada cien mil habitantes.

La incidencia en ocupación de camas UCI también se encuentra en riesgo extremo y la postividad de las pruebas realizadas roza el 10 por ciento, a pesar de que se hacen menos pruebas por habitante que en el conjunto del país, que tiene una positividad del 7,17 por ciento.

La situación sigue exigiendo una prudencia máxima por parte de la ciudadanía para tratar de limitar los contagios del virus y el celo extremo en el cumplimiento de las medidas de seguridad: reducir al máximo los contactos sociales, evitar aglomeraciones, mantener la distancia de seguridad de 2 metros, el uso de las mascarillas siempre que se salga de casa, especialmente en los espacios cerrados, y no acudir al trabajo ante el menor síntoma que resulte compatible con la enfermedad, además del lavado de manos se antojan claves para seguir controlando la pandemia.