La Policía Nacional de Ceuta ha detenido a un joven mayor de edad cuya identidad responde a las iniciales F.J.S.O. y ha puesto a disposición de la Fiscalía de Menores de la ciudad a cuatro niños de entre 13 y 16 años como presuntos integrantes del grupo de adolescentes que durante la última semana ha apedreado hasta en tres ocasiones los autobuses urbanos locales. Todos ellos son residentes en Juan Carlos I.

Los dos menores que tienen más de 14 años han quedado en libertad con cargos por un presunto delito de daños del que ya pueden ser responsables penalmente y el grupo especializado de la Jefatura Superior continúa las investigaciones para identificar al resto de vándalos.

La Policía sospecha, según ha informado este jueves a través de un comunicado de prensa, que los arrestados y sus compinches actuaban en las barriadas de Juan Carlos I y Erquicia y en Avenida Reyes Católicos-O´Donnell “imitando” a los grupos de jóvenes del Príncipe Alfonso que el año pasado obligaron a las Fuerzas de Seguridad a cercar la zona para evitar los continuos ataques que sufrían los autobuses de la concesionaria del servicio.

Sus imitadores actuaban “apostados al anochecer en las inmediaciones de las paradas”, desde donde, “amparados en la oscuridad de la noche para asegurar su impunidad”, arrojaban piedras contra las lunas de los vehículos.

La colaboración ciudadana y la presencia de efectivos policiales sobre el terreno permitieron a los agentes, la semana pasada, la identificación y posterior detención de un joven mayor de edad “cuando todavía portaba en sus manos una piedra de similares características a las lanzadas contra el último autobús siniestrado”.

La Ordenanza de Buen Uso de los Espacios Públicos aprobada hace seis meses por el Pleno de la Asamblea tipifica como falta grave “causar deterioros en los vehículos del servicio público del transporte colectivo de viajeros por comportamientos incívicos o el uso inadecuado de los mismos, cuando el hecho no pueda calificarse como infracción penal”. Dicha conducta se sancionada, tras la entrada en vigor de esta norma, con multas de entre 150,26 y 1.500 euros.