La Guardia Civil ha detenido a tres migrantes subsaharianos acusados de atentado contra agentes de la autoridad tras la algarada registrada el sábado en las inmediaciones de la ITV mientras se registraba el intento de salto de la valla fronteriza en Finca Berrocal. Se trata de tres súbditos cameruneses residentes en el CETI de Ceuta A.S.C.N.T, Y.S.M. y J.F.B.

La actuación no se encuentra aún finalizada, continuándose la búsqueda de un cuarto subsahariano pendiente de detención, puntualiza la Guardia Civil en un comunicado.

En la mañana del pasado día 10, relata la Guardia Civil en nota de prensa, mientras componentes de la Guardia Civil de la Comandancia de Ceuta establecían un dispositivo de disuasión y retención de masas en evitación de un intento de entrada masivo de subsaharianos por la zona perimetral con Marruecos vulnerando los elementos de contención fronterizos, un grupo compuesto por unos 30 subsaharianos procedentes del CETI de esta Ciudad Autónoma se dirigieron hacia el lugar en que se estaba produciendo el asalto con la finalidad de apoyar y alentar a los asaltantes.

“No obstante tras ser informados los concentrados de que la carretera por la que pretendían acceder era de acceso restringido y de que no podían continuar, parte del grupo, haciendo caso omiso a las indicaciones de la Fuerza, continuó su marcha hasta llegar a las proximidades de la vía de acceso a las instalaciones de la I.T.V.”, explica la Benemérita apunbtando que, ante la negativa, “el grupo comenzó a mostrar una actitud violenta y agresiva hacia el dispositivo de la Guardia Civil”

“La actitud violenta llegó a su máximo exponente con el lanzamiento de piedras de gran tamaño contra los agentes de la Guardia Civil del dispositivo, utilizando incluso, uno de ellos, la camiseta que vestía a modo de onda para dar mayor virulencia al objeto contundente que lanzaba. Igualmente, otro de los lanzadores ya se personó en al lugar con el rostro totalmente cubierto, al objeto de que presuntamente no se le pudiera identificar durante su agresiva actuación”.

El lanzamiento de piedras alcanzó a dos de los componentes de la Guardia Civil, “impactando en uno de ellos en el gemelo de la pierna derecha, teniendo que ser asistido de la contusión producida; siendo alcanzado el otro en su mano izquierda, causándole, a pesar de portar un guante protector, una fisura, de la que tuvo que ser asistido en el Hospital Universitario de esta ciudad, causando baja para el servicio”.