Rivotril, Gardenal, Tranquimazín... Medicamentos que utilizados bajo prescripción médica no presentan riesgos, pero mezclados con otras sustancias legales o ilegales, como hachís, alcohol o pegamento se convierten en el Karkubi, la droga de los pobres que provoca alucinaciones, conductas psicópatas rayando lo dantesco e incluso automutilaciones.

El Karkubi está haciendo estragos en los barrios marginales de Marruecos mezclado con el hachís y podría estar entrando en los barrios marginales de Ceuta como el Príncipe, aunque hasta ahora se sorpecha que Ceuta podría estar sirviendo de puente para la llegada de estos medicamentos al mercado marroquí. Así, mientras el hachís viaja desde este lado hacia la Península, el tranquimazín haría el viaje inverso.

Un ejemplo podría ser la incautación este lunes en el Puerto de 95 pastillas de trankimazín y 390 comprimidos de Rivotril, ambas sustancias empleadas en la composición de la “droga de los pobres” o “karkubi”. En esta actuación ha sido detenido H.S.M. nacido en Ceuta y de 20 años de edad, cuando acababa de llegar a Ceuta procedente de Algeciras con la ilícita mercancía.

Hace poco más de diez días, Policía Nacional y Guardia Civil desmantelaban un entramado con implicados en Ceuta que en dos años falsificó unas 50.000 recetas con las que compraban benzodiacepinas, que después vendían de forma ilegal Marruecos. Una vez que elaboraban las recetas falsas, adquirían las pastillas a través de pasadores en oficinas de farmacia de prácticamente todo el territorio nacional.  El principio activo de este medicamento se utiliza para elaborar el “karkubi”.

Por otro lado, también ha sido detenido A.M.A., nacido en Ceuta de 38 años de edad, quien trasportaba, adosadas en la pelvis, 5 tabletas de Hachis de gran pureza, destinadas al tráfico de minorista.

"Desde la Policía Nacional se quiere incidir en la necesidad de denunciar este tipo de hechos delictivos, toda vez que afecta directamente a la salud de nuestra juventud y colectivos desfavorecidos", insisten desde la Policía.