Alrededor de cien migrantes subsaharianos han entrado a las 09.00 horas de la mañana de este miércoles 22 de agosto en Ceuta a través de la valla fronteriza, aprovechando la relajación de las fuerzas marroquíes al coincidir con la hora del rezo colectivo al aire libre, la Musal-la, que marca el inicio de la Fiesta del Sacrificio, festivo local también en Ceuta. Siete guardias civiles han resultado heridos leves por quemaduras con cal viva tratando de repeler el asalto y uno ha debido ser trasladado al Hospital Universitario de la ciudad autónoma.

Según Fuentes del Ministerio del Interior, fueron 300 los migrantes que lo intentaron, quedando más de 200 en el camino. En esta nueva entrada, los migrantes han logrado esquivar a la Guardia Civil arrojando a los agentes cal viva, ácido de baterías de automóvil y bolas de heces humanas, usando el mismo método que en el salto masivo del pasado 26 de julio cuando lograron acceder a la ciudad 602 migrantes, según han informado a Europa Press fuentes de la Delegación del Gobierno.

Se da la circunstancia de que los hechos se han producido justo a la hora de la celebración del rezo colectivo que se celebra con motivo de la Pascua del Sacrificio o Fiesta del Cordero en Ceuta, mezclándose los miles de fieles musulmanes que salían del rezo colectivo al aire libre, con los migrantes que atravesaban la ciudad camino del Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI). Muchos de los migrantes presentaban profundos cortes en brazos y tórax provocados por las cuchillas de las concertinas que coronan la valla fronteriza.