El titular del Juzgado de lo Penal número 1 de Ceuta ha señalado para este jueves a las 10.15 horas el inicio de las sesiones del juicio oral en el que están imputados dos doctores, J.J.Q.G. y S.O.A. por un presunto delito de homicidio imprudente a cuenta de la muerte de dos gemelos neonatos en el antiguo hospital del INGESA (una niña que pesó al nacer 490 gramos y un niño con 470 gramos, tras 24 semanas y media de gestación).

Según ha recordado el Defensor del Paciente a través de un comunicado de prensa, los médicos de guardia que asistieron a la madre "no eran ginecólogos ni pediatras, sino simples médicos" y, "presuntamente sin consultar con los progenitores, decidieron que los niños no eran viables y por tanto, sin autorización de los progenitores, decidieron no meterlos en la incubadora ni alimentarlos, dejándolos morir sin más, informando a los padres que iban a tener una vida de tan sólo diez minutos y que intentar intubarlos y alimentarlos, servía sólo para 'alargar el sufrimiento".

"Sin embargo, contra todo pronóstico, lo cual demuestra que hubieran podido sobrevivir", siempre según la versión del Defensor del Paciente, "la niña vivió 22 horas y el niño 12 horas, debatiéndose entre sufrimientos y lloros".

Esta asociación, que ha tildado el caso de "escalofriante", ha denunciado además que "para mayor gravedad, el hospital dijo que se iba a hacer cargo del entierro y a día de hoy todavía no le ha dicho a los progenitores en qué sepultura los han enterrado o si los han incinerado".

La familia mantiene la acusación particular por lo que entiende que ha sido "una clara denegación de asistencia sanitaria, hurtando los licenciados en Medicina la decisión de los progenitores, sobre si se debía o no intentar salvar la vida de sus hijos".

Homicidio por imprudencia profesional grave, imputa la Fiscalía

La Fiscalía pide cuatro años de cárcel por un delito de homicidio por imprudencia profesional grave y seis de inhabilitación especial para el ejercicio de su profesión por la muerte de dos neonatos en el hospital público local en diciembre de 2006. En concepto de responsabilidad civil, el Ministerio Fiscal solicita que se condene a los acusados, al Ingesa y a una compañía de seguros, "con abono preferente" por parte de esta última, al abono a los padres de los bebés de 500.000 euros, según el auto de apertura de vista oral.

La acusación particular eleva sus solicitudes de pena para los dos médicos, cuya identidad responde a las iniciales J.J.Q.G. y S.O.A., a un total de siete años de cárcel, seis de inhabilitación especial para el ejercicio de su profesión y dos para desempeñarla en un hospital público por los delitos de homicidio imprudente, intrusismo y falsedad en documento público.

Los hechos que trata de esclarecer el proceso tuvieron lugar el 30 de noviembre de 2006 en el hospital del INGESA de la ciudad autónoma después de que una mujer diese a luz a un niño y una niña con 24 semanas y media de gestación que pesaron 470 y 490 gramos respectivamente.

Tras el parto los dos médicos de guardia imputados, que no son especialistas en Pediatría ni en Ginecología, consideraron la "inviabilidad" de los recién nacidos y, sin autorización de los padres, decidieron no meterlos en la incubadora. Los neonatos fallecieron a las 12 y a las 22 horas de vida, respectivamente.