El pasado 1 de julio, la Jefatura Superior de Policía de Ceuta recibió una denuncia en la que una ciudadana alertaba de el día anterior su hijo había recibido una llamada en la que se le comunicaba, por parte del abogado de "una conocida compañía de teléfonos", que su madre tenía contraída una deuda con ellos de más de 700 euros.

Al saber esto, la denunciante llamó a la empresa, que le confirmó la deuda asociada a dos líneas diferentes contratadas en 2012 y 2013, respectivamente. La denunciante alegó que no había solicitado ninguno de esos números y que desconocía quién podía haberlo hecho a su nombre.

La mujer pensó que sus argumentos no habrían servido de nada pero gracias a esa conversación se obtuvo "una muy importante información que posteriormente pudo ser utilizada para que los agentes siguieran la pista de la posible autora".

Partiendo de la denuncia y tras constatar que la dirección de la contratante era la misma que la de un familiar de la víctima, los agentes confirmaron que una prima, E.M.R.O., natural y vecina de la ciudad autónoma de 28 años, había hecho el trámite.

Los agentes lograron localizarla y detenerla en su domicilio. En un primer momento reconoció los hechos pero después aseguró que su prima lo sabía todo y que incluso había estampado su firma en el contrato, "algo que los investigadores sabían que no podía ser posible debido a que la denunciante era analfabeta y ni siquiera sabía hacerlo".

Además se pudo confirmar el conocimiento que la autora de los hechos tenía de estas líneas porque "en dos ocasiones procedió a anular recibos de estas en la entidad bancaria donde estaban domiciliados, quedando patente su autoría". Ahora se le imputan dos delitos de usurpación de estado civil y de estafa.