La Policía Nacional detuvo el pasado miércoles 31 de agosto a una mujer acusada de simular el secuestro de su hija menor, delito del que acusaba a su hermano. Truculenta denuncia que resultó poco más de 48 horas después resultó ser falsa.

En la tarde noche del pasado 29 de agosto, relata la Policía nacional en un comunicado remitido por la Delegación de Gobierno, se persona en la oficina de denuncias de la Jefatura Superior de Policía de Ceuta “una ciudadana marroquí con permiso de residencia en España acompañada por dos de sus hijos, denunciando el secuestro de una de sus hijas de quince años de edad con minusvalía psíquica”.

El secuestro según la denunciante, se había llevado a efecto en Ceuta, por parte de uno de sus hermanos y su esposa, pidiendo a cambio de la menor la cantidad de quince mil euros en efectivo o la entrega de un vehículo de su propiedad.

Como es de suponer, se activaron inmediatamente se los protocolos para los casos de secuestros, a la vez que se comunicaban los hechos a la Autoridad Judicial iniciándose una investigación en el entorno del hermano de la denunciante. Pero pronto las sospechas empezaron a apuntar a la propia denunciante, especialmente por su comportamiento. La Policía citó a declarar al día siguiente a la madre de la hija presuntamente secuestrada, “no asistiendo alegando encontrarse fuera de la ciudad atendiendo asuntos familiares”.

Además, con las primeras pesquisas salieron a reducir antecedentes llamativos: “Fruto de las primeras investigaciones, se pudo comprobar que la denunciante en el año dos mil cinco, había presentado otras denuncia por el secuestro de uno de sus hijos menores, por parte de su ex pareja, en la localidad de Gandía, donde residía y reside actualmente, exigiéndole el pago de doce mil euros por la menor, resultando ser una denuncia falsa, tal y como quedó acreditado en las Diligencias tramitadas al efecto y tramitadas a la Autoridad Judicial competente”, explica la Policía en su comunicado.

Al día siguiente, 31 de agosto, el hermano de la denunciante y su esposa (K.B y R.E.M) se presentan voluntariamente en la Jefatura Superior “al haber tenido noticias de que eran buscados por la Policía, como presuntos autores del secuestro” siendo inmediatamente arrestados. Apenas una hora después se persona en comisaría la denunciante acompañada de sus dos hijos y “continúa manteniendo la veracidad del secuestro, así como las exigencias económicas para la devolución de la menor”.

Seis horas más tarde, a las 19 horas “y ante las evidencias en las arduas investigaciones llevadas a cabo por los Policías actuantes, que demostraban que tal secuestro no se había producido”, la mujer termina admitiendo la falsedad de los hechos denunciados, “alegando que había sido para vengarse de su hermano y que lo metieran en la cárcel, al parecer por una deuda que no le había satisfecho”.

En todo momento, la niña había estado con ella en Tánger y en el instante de la detención se encontraba en el domicilio de una amiga de la ya detenida en una localidad “entre Tánger y Larache”.

Finalmente, A.B, de nacionalidad marroquí y permiso de residencia en España fue detenida por simulación de delito y posteriormente puesta en libertad por indicación Judicial, al igual que su hermano y su cuñada, con la obligación de comparecer todos ellos ante la misma Autoridad este martes seis de Septiembre.