El que fuera vicepresidente del Gobierno y consejero de Sanidad, Javier Guerrero, continúa en prisión preventiva tras el parón veraniego en la Justicia. Inaugurado ya el Año Judicial, y retomada la actividad en los juzgados -agosto es un mes inhábil para cuestiones de urgencia y causas con preso-, la situación de Guerrero sigue siendo la misma. Pero hay una novedad.

Guerrero ya no está representado por abogados ceutíes. Desde que comenzaran las acusaciones contra el en redes sociales hasta que se ordenara su entrada en prisión, tres han sido los letrados ceutíes -Manuel Martínez Selva, Luz Elena Sanín y Javier Cabillas- que han defendido en uno u otro momento al conocido médico ceutí. Este ha dado un paso adelante, y ha contratado los servicios de otra letrada.

Esta no es ceutí, ni tiene vinculación conocida con la Ciudad Autónoma. Se trata de Cecilia Pérez-Raya, colegiada y ejerciente en Málaga. Licenciada en Derecho por la Universidad de Navarra con calificación de sobresaliente, comenzó su andadura profesional hace justo cuarenta años, en 1983. En su currrículum figura además que es profesora asociada del Departamento de Estado y Sociología, en el área de Derecho Constitucional de la Universidad de Málaga y experta universitaria en Crimonología por el Instituto Andaluz Universitario de Criminología desde 1996. También ejerce su labor docente en la Escuela de Práctica Jurídica de Málaga, en el Máster de la Abogacía en Materia Penal y del Máster de Derecho Penal y Política Criminal organizado por la Universidad de Málaga, además de ser autora de varios artículos, colaboraciones en libros y conferenciante en seminarios jurídicos.

Durante este verano, se pidió la venia al último abogado de Guerrero, Javier Cabillas, para proceder al cambio de defensa. Cumplido el trámite, y a la espera de los primeros movimientos de Pérez- Raya, fuentes judiciales apuntan que "no ha habido ninguna novedad más" en la situación de Guerrero, en prisión desde inicios de este año.