La Policía Local identificó durante la madrugada del pasado domingo a media docena de jóvenes con entre 12 y 21 años y denunció al responsable de un trastero ubicado en la barriada Juan Carlos I por infracción a la Ordenanza de Ruido por perturbar el descanso de los vecinos con una reunión que también ha conllevado denuncias para todos ellos por vulnerar las medidas establecidas para controlar la pandemia, que limitan a cuatro el número máximo de personas no convivientes que pueden estar juntas en cualquier espacio público o privado.

En el lugar se comisionaron varias dotaciones que, tras inspeccionar la zona y entrevistarse con varios vecinos, constataron que el ruido era generado por "varios individuos estaban llevando a cabo una fiesta privada en el trastero de un edificio, creando molestias evidentes por el alto volumen de la música además de los posibles incumplimientos a las normas dictadas por las autoridades sanitarias".