Apenas una docena de taxistas de la Asociación de Trabajadores de Auto Taxi se han concentrado este minerales ante Delegación de Gobierno para exigir medidas urgentes para atajar el clima de inseguridad al que se enfrentan, con el goteo de atracos y problemas con los que se encuentran cada día los asalariados del taxi, “los que asumimos el riesgo”.

A día de hoy, los taxistas evitan acudir a servicios en “zonas conflictivas” a sabiendas de que pueden tener problemas, ha explicado Francisco Manuel Toledo portavoz de colectivo. ¿Cuáles son esas zonas peligrosas?: “Todo lo     que no es el centro es conflictivo”, ha resumido Toledo, señalando que en el centro de la ciudad autónoma hay  más iluminación, cámaras de seguridad y presencia policial. Aunque tampoco en el centro están seguros del todo. Tras los últimos atracos, los malhechores han cambiado el modus operandi, ahora es una cliente “bien vestido” quien pide que le lleven a una zona más oscura y poco vigilada para después encañonar al taxista. “Se está repitiendo el mismo patrón. Una persona bien vestida, se monta en el centro, y te pide ir al extrarradio para acometer el delito en una zona oscura. Lo más grave es que se están utilizando armas de fuego”.

Las medidas de presión al alcance de los trabajadores del taxi son pocas, ha admitido. Su último recurso pasaría por  dejar de prestar el servicio en horario nocturno o en fines de semana, los turnos en los que habitualmente trabajan los asalariados.

A medio y largo plazo, los trabajadores, al igual que reclama la Asociación Unificada del Taxi, pasa por mamparas de seguridad y sobre todo por la instalación de cámaras de vigilancia en los vehículos, lo que, creen, podría desincentivar los atracos. Francisco Toledo, presidente de la Asociación de Trabajadores Asalariados del Taxi, ha explicado que los últimos dos atracos violentos registrados en las últimas semanas —el último en Loma Colmenar a plena luz del día y a punta de pistola—han terminado de empujar a los taxistas ha pedir una solución. “Tememos por nuestras vidas, y si tenemos que dejar de trabajar qué sustento económico llevamos a casa. Pedimos cámaras de seguridad y más presencia policial. Si faltan policías, que la Delegación convoque plazas o busque la solución que sea pero que se preocupe por los trabajadores del taxi”, ha reivindicado Toledo. “Que se pongan las cámaras y esa persona que se monta que sepa que está siendo grabada, y si comete un delito pueda ser utilizada ante la justicia”

Los trabajadores del taxi coinciden con la patronal en la necesidad de instalar cámaras y mamparas. Por su parte, la Asociación Unificada del Taxi, que se ha desmarcado de las protestas, trabaja en paralelo con Delegación de Gobierno y co la Ciudad, a través de la Consejería de Servicios Urbanos y Medio Ambiente en la búsqueda de vías de financiación para la instalación de medios de seguridad.

Desde Delegación de Gobierno, como ya hiciera en otras ocasiones la propia delegada, Salvadora Mateos, ha sido el Jefe de Gabinete, Juan Hernández, quien ha bajado a la Plaza de los Reyes para parlamentar con los manifestantes, emplazándoles a una reunión la próxima semana.