El personal del Hospital Universitario no gana para sustos con los pacientes y sus acompañantes que acuden al mismo. Si hace dos semanas fue un vigilante de seguridad el que acabó apaleado por varios familiares de un niño herido este miércoles ha sido una celadora la que ha sufrido, presuntamente, la embestida de una usuaria armada con el palo de una fregona.

Según ha explicado el Ingesa a través de un comunicado "el incidente se produjo este martes cuando una mujer, que se encontraba en el mostrador de Consultas Externas, se alteró hasta el punto de agredir a un empleada del centro hospitalario con el palo de una fregona que sustrajo del carrito de limpieza, que se encontraba en esa zona justo en ese momento".

"Seguidamente se avisó a seguridad y llegó de inmediato un vigilante", prosigue el relato de la Administración sanitaria, según el cual "hasta tres vigilantes de seguridad que llegaron al comunicarse la alarma llegaron a presenciar el lamentable incidente". "A pesar de la presencia de los miembros de seguridad, la supuesta agresora continuó insultando y amenazando a la celadora", ha lamentado el Ingesa.

Siguiendo con el protocolo de seguridad del Hospital se avisó igualmente a la Policía, que tomó los datos de la persona que aparentemente se encargó de alterar la normalidad del servicio en el centro sanitario.

La trabajadora del Hospital supuestamente agredida, que sufrió un ataque de ansiedad, presentó en la misma tarde del miércoles una denuncia con motivo de los hechos relatados contra la mujer que al parecer le agredió, insultó y amenazó sin ningún motivo.

El Ingesa ha "rechazado" y "lamentado profundamente" la sucesión de este tipo de comportamientos incívicos, por lo que ha brindado asistencia letrada a la afectada en el juicio rápido que debía haberse celebrado durante la mañana de este jueves, vista que finalmente "se ha suspendido hasta nueva fecha".

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