El Consejo  de Empadronamiento de la Ciudad ha dado de baja en lo que llevamos de 2018 a 600 falsos censados en las ciudad autónoma, casos de fraude que, calcula el consejero de Gobernación, Jacob Hachuel, podrían rondar los 800 si se mantiene el ritmo.

Es el fruto del trabajo de la Policía Local que detecta un caso sospecho en el 25 por ciento de sus inspecciones rutinarias. Solo en la última semana, se comprobaron 172 empadronamientos en la ciudad, procediendo al inicio del expediente de baja de  41 ciudadanos por incumplimiento de la normativa vigente. Solo el inicio del expediente, subrayó Hachuel. “La Policía no da de baja a nadie en el padrón”, matiza. De ello se encarga el Consejo de Empadronamiento y el procedimiento es garantista, procediéndose a una segunda inspección y un periodo de alegaciones. “Somos muy estrictos y rigurosos”, se felicitó Hachuel.