El análisis está dividido en dos partes. La primera referente a las propias elecciones en la ciudad de Ceuta, y la segunda respecto a los partidos que han obtenido representación al parlamento europeo por la circunscripción española.

Resultados en Ceuta

El primero de los datos básico es la incesante caída de la participación cada nueva elección al parlamento europeo. La abstención es la verdadera ganadora en estas elecciones, Ceuta ocupa el dudoso honor de ser la autonomía con menor participación electoral toda España. A menos que el electorado ceutí haya cambiado ideológicamente a posiciones anarquistas o antisistema (un escenario nada plausible) no es un buen síntoma para la legitimación y el correcto funcionamiento del sistema democrático una desafección tan alta. Una de las formas más fidedigna de representar las diversas inquietudes, pensamientos, apoyos u oposición a determinadas política es por medio de las urnas.

Si esto está fallando, todos los partidos de Ceuta deberían reflexionar seriamente en que se está errando. Las causas creo yo, se encuentran en una desconexión entre las instituciones europeas y los electores ceutíes; no obstante también es pertinente apuntar la variable coyuntural de la desafección ante los partidos políticos y al sistema en general que se vive en España.

Tanto el partido Popular como el Partido Socialista han perdido una gran cantidad de votos frente a las elecciones del año 2009. Ambos se consuelan, alegando el primero ser la fuerza mayoritaria en Ceuta, y el segundo en consolidarse como la segunda fuerza por delante de Coalición Caballas. La alta abstención perjudicó, presumiblemente, más a los populares que a los socialistas. El partido Popular ha recibido un duro golpe a su hegemonía. Está dañado pero no hundido, y este barco aún parece lo suficientemente robusto como para seguir navegando. Por otra parte, el Partido Socialista obvia que, en buena medida, los votos recibidos en los anteriores comicios europeos estaban relacionados con la no participación de U.D.C, entre otros, y la recomendación de votar a los socialistas para contrarrestar los votos de PP.

La Coalición Caballas, integrada en la coalición Primavera Europea, quedó en tercera posición. No puede calificarse ni de positivo ni de negativo su resultado. Estancamiento es el término preciso para describir la situación. Comparando los resultados de las elecciones de Caballas en las elecciones generales de 2011 y los de éstas, han perdido en torno a 300 votos. La coalición se contenta con estar representada en el parlamento por medio del diputado de Compromis, Jordi Sebastià.

Frente al retroceso de los grandes, el ascenso de los pequeños. UPYD, Podemos e Izquierda Unida sobrepasaron los quinientos votos. Las tres formaciones deben de estar de enhorabuena por el alza en el voto. UPYD paulatinamente consigue cada vez más respaldo en cada nueva elección celebrada en Ceuta. La gran sorpresa a nivel nacional, el partido del doctor Iglesias, también sobrepasó los quinientos votos; está por ver como gestionan este resultado.

Las promesas electorales de los partidos que consiguieron representación para Ceuta son muy similares, casi todos tienen la entrada en la Unión aduanera y el problema migratoria en el punto de mira.

El PP y PSOE prometen lo mismo: entrada en la Unión aduanera y en el comité de regiones, así como mantener las inversiones europeas en la ciudad. En el pasado los dos partidos pudieron perfectamente haber intentado solicitar la entrada en la unión aduanera, pero ninguno cumplió su promesa. ¿Qué pasará esta vez?

IU: Según el candidato Tasio Oliver, que estuvo en nuestra ciudad, Ceuta se integrará en el comité de regiones. El candidato, que finalmente no tendrá un asiento en el europarlamento también apuntó a una mala administración en la ejecución de los fondos europeos.

De los partidos nacionalistas poco se puede esperar para nuestra ciudad. En todo caso, una atención en torno a los problemas fronterizos. Nunca se han preocupado por Ceuta y Melilla, a menos que pudieran señalar alguna mala gestión del gobierno central.

UPYD también lleva en su programa la adhesión de Ceuta en la Unión Aduanera, así como una política específica ante el problema migratorio.

Primavera Europea: Está formación tiene uno de los programas más ambicioso para la ciudad. Entrada en la Unión aduanera, reconocimiento de las circunstancias específicas de Ceuta, revisar la política de fondos y la política migratoria.

Podemos es el partido con el que más duda se puede tener. A priori es una formación que no tiene propuestas exclusivas para la ciudad, o al menos yo no las he localizado. Vagamente podemos intuir que en el apartado “4.7 - Potenciar la igualdad entre los territorios de la UE” Ceuta estaría incluida. Hay, sí es cierto, una mención expresa a las islas Canarias en pos de su desarrollo como región ultraperiférica.

Uno de los interrogantes que se me plantean en torno a Podemos es el reconocimiento que propugna en su programa del mal llamado “derecho a decidir” de los pueblos de Europa. Derecho a decidir ¿Qué?, decidir es un verbo transitivo, necesitamos saber que se quiere decidir (realmente es una sinécdoque, para aludir a la autoderminación, puesto que en realidad no se quiere apelar a decidirlo todo, sino solo una cosa concreta).

Además, ¿Quiénes son esos pueblos de Europa? ¿Quién determina lo que es un pueblo? Todo esto viene a colación porque el partido I.A (Izquierda Anticapitalista) de ideología trotskista, uno de los mayores impulsores de Podemos (jocosamente en documentos internos de I.A, previos al desarrollo de Podemos, se habla de la ”operación coleta”, en alusión al líder de la formación) tiene un papel fundamental en el nuevo partido Podemos. De I.A procede el número siete de la lista de Podemos, Miguel Urban Crespo, en estas elecciones. Se presentó por I.A en las anteriores elecciones generales de 2011. Ante una pregunta en el diario Público sobre la entrega de Ceuta y Melilla a Marruecos, respondió que Ceuta y Melilla eran restos de la ocupación española en el norte de África, y que esto era incuestionable. En un hipotético referéndum no estaba muy seguro que ganará la propuesta española. (http://charlas.publico.es/miguel-urban-2011-11-10) En resumen que Ceuta y Melilla son colonias, no una verdadera parte de España.

El problema no está en la realización de un referéndum o no. De hecho incluso se puede considerar un avance que una parte de la izquierda no socialdemócrata, ya no solicite la entrega a Marruecos directamente como se hacía en los años de la transición. El problema está en un esquema cerrado de unos “pueblos” que tienen la soberanía y otras partes que son antinaturales e ilegítimas. Para I.A, por muchos referenda que se hagan y se ganen, siempre habrá verdaderas naciones y restos del imperialismo. Con esto no acuso al Partido Podemos de actuar con mala fe contra los ceutíes. Lo que me preocupa es el rumbo que se tome, ya que I.A y sus miembros son un elemento capital en la configuración del partido. No estaría mal que los miembros del círculo de Podemos Ceuta aclaren estos asuntos con el Partido, y ofrezca una respuesta clara a los ciudadanos.