El Sistema de Monitorización de la Mortalidad diaria (MoMo) en España ha apreciado un "exceso" de defunciones en España (56% al alza) durante las primeras semanas del Estado de Alarma por el coronavirus, concretamente desde el 17 de marzo hasta el pasado martes, singularmente agudo en Ceuta (275%), donde la estadística hacía prever cuatro defunciones y se registraron quince.

Sin embargo, la Consejería de Sanidad no cree que las cifras frías puedan alimentar la extensión a este lado del Estrecho de la polémica sobre si el cómputo gubernamental de fallecimientos atribuibles al Covid-19. Según el Gobierno de la Ciudad está “sanitariamente” constatado que los cuatro decesos oficialmente atribuidos a la pandemia son los que ha causado hasta la fecha en la ciudad y que no se han producido más.

Al margen de los dos septuagenarios, de la mujer con más de 80 años y de la joven que perdió la vida con 27, todos ellos fallecidos en el Hospital Universitario, al área competente para la gestión administrativa de los fallecimientos de la Administración regional llegó otro caso anotado como “posible coronavirus”, el de un varón que pereció en la Plaza de los Reyes aparentemente víctima de un infarto. Se le realizaron las pruebas pertinentes de Covid-19  y dieron “negativo”.

Previamente, la Administración había contemplado los protocolos previstos para el tratamiento y enterramiento de los cadáveres de personas que pudiesen haber fallecido con coronavirus para casos de fallecidos con cuadros compatibles con la pandemia, como neumonías y similares, pero en todos ellos “sanitariamente se ha determinado que habían muerto por otras causas”.

Idéntica impresión han transmitido a este medio desde el INGESA, que prevé que el coronavirus tendrá en Ceuta una tasa de letalidad del 3,7%.

El Ministerio de Justicia ha pedido a los 4.000 registros civiles que hay en España el envío inmediato de la información sobre todas las licencias de enterramiento tramitadas desde el día 14 de marzo, víspera de la entrada en vigor del decreto del Estado de Alarma por la pandemia de coronavirus. La documentación debe incluir el número de fallecimientos, la localidad donde se produjeron, el lugar de la muerte (si fue en un hospital, un domicilio, una residencia de mayores...) y si la muerte fue por coronavirus.

El objetivo del Gobierno central con este requerimiento es aclarar la cifra real de fallecidos por Covid-19 en España, que según Sanidad ronda las catorce mil personas (muertes confirmadas con prueba diagnóstica), pero en los datos oficiales no están incluidos, por ejemplo, los ancianos fallecidos en residencias.