La pandemia va a pero y “no tiene visos de mejorar”, según el consejero de Sanidad de Ceuta, Javier Guerrero, por eso este viernes se ha reunido el Consejo Interterritorial de Salud para abordar peticiones “que habían solicitado muchísimas Comunidades Autónomas” y que se han aprobado por “unanimidad” y que en la práctica suponen nuevas restricciones, especialmente al ocio nocturno, aunque no sólo. Y que en Ceuta tendrán que ser desarrolladas por la propia Consejería de Sanidad vía Boletín Oficial de la Ciudad Autónoma de Ceuta (BOCCE), como en el resto las plasmará en decretos cada gobierno autonómico. Las medidas las ha adelantado al término de la reunión el propio ministro de Sanidad, Salvador Illa, y aunque en cada autonomía se aplicarán recetas propias, Guerrero ya ha anticipado que Ceuta se ha sumado a esas peticiones al entender que “La unificación de medidas es la forma más eficaz de luchar contra la pandemia. Vamos a hacer todo lo propuesto y que se ha aprobado por unanimidad”.

Todo entrará en vigor en breve. Y todo pone el dedo en la yaga dolorida del ocio nocturno y en las actividades de la juventud, que tal y como ha venido insistiendo desde hace meses Guerrero, supone un flanco débil que el virus aprovecha para propagarse. Al mismo tiempo se aplican nuevas restricciones a las residencias de ancianos, el sector más vulnerable para tratar de protegerlos del virus.

Sin medias tintas, Guerrero ha admitido que estas medidas “suponen otra vez la caída del tejido empresarial y en Ceuta y en el resto del país”. Y eso a pesar de que la situación en la ciudad de momento es buena, “envidiable” ha dicho Guerrero en rueda de prensa o antes hablando con el “presidente”, un “somos los mejores” en tono distendido, sin ocultar en ningún momento que todo lo que sucede en relación con el virus es triste y doloroso.

Se pone el foco en medidas para tratar de frenar la expansión del virus en las actividades de ocio, especialmente el nocturno, que está demostrado que es por donde está atacando la pandemia, pero se mira a su vez con especial preocupación a la movilidad entre regiones.

Medidas que entrarán en vigor en breve

Los bares de copas, las discotecas y las salas de baile en toda España, también en Ceuta no podrán permanecer abiertas más allá de la 1 de la madrugada y no podrán admitir nuevos clientes después de las 00.00 horas. Mismo horario para la hostelería y la restauración. Pero además aquí, se hace hincapié en la distancia a mantener por los clientes. 1,5 metros de modo interpersonal y nunca más de 10 personas por mesa o reunión.

Nuevas restricciones para las residencias de ancianos. Algunas ya anticipadas por la propia Consejería de Sanidad local. Se limitarán de nuevo las vistas, “nos queda por ver el tiempo y si es a una o dos personas”. Se exigirán PCR antes de ingresar y al personal se le realizarán pruebas de forma periódica cada 15 días. Así mismo se van a restringir de nuevo las salidas de los residentes, como durante el confinamiento, aunque queda por ver en qué modo. Algo que tendrá que plasmarse en el Boletín Oficial de la Ciudad Autónoma de Ceuta.

Guerrero y su Consejería de Sanidad tendrán que aprobar cualquier evento multitudinario. Esto es, el denominado sector BBC, bodas bautizos y comuniones (para las que ya hay principio de acuerdo con la Vicaría para que puedan desarrollarse con limitaciones en septiembre). Sanidad tendrá que autorizar los festejos y las medidas pueden incluso afectar a los eventos culturales ya programados para otoño. Todo de nuevo por concretarse en un próximo decreto.

Ya está prohibido el botellón, se va a precintar la marina y las playas durante todas las noches. Y se estudian nuevas limitaciones en el uso de estos espacios, también del Parque Marítimo.

Prohibido fumar en la vía pública si no se pueden mantener 2 metros de distancia. Igualmente para las pipas, las denominadas shishas. Incluso en las terrazas de los locales de hostelería.

Y Guerrero va a tratar con Ingesa la posibilidad de realizar pruebas PCR a modo de criba entre personas que hayan podido estar expuestas al virus en caso de que se dé un brote epidémico en la ciudad. Básicamente, en ese sentido, la reunión de este viernes, endurece los criterios para la realización de PCR. Se pasa de ser obligatoria la realización sólo para los casos sintomáticos a, tal y como ya se venía haciendo en Ceuta, a contactos de casos sospechosos y confirmados.

Y se estudian medidas similares para quienes regresen a la ciudad desde zonas con alto índice de prevalencia de la enfermedad, ya sea en barco o en helicóptero. En este caso se trataría de la realización de test rápidos.

Las autonomías han pedido al Ministerio que igual que muchos países ya exigen a los que viajen desde España que aporten un PCR negativo de cómo máximo 48 horas antes de su llegada al país, España haga lo propio con quienes lleguen al país de zonas con alta prevalencia de la pandemia.

“No se ha hablado de sanciones” para quienes incumplan las medidas, como la de fumar si no hay dos metros. Tampoco de un nuevo confinamiento, aunque sí de hacer mucha más pedagogía. En ese sentido, Guerrero ha vuelto a hacer hincapié en el papel, por desgracia negativo, que está jugando en la expansión de la pandemia la población más joven: “ha bajado la edad media. Yo me anticipé o lo previne y vuelvo a pedir que la gente joven se responsabilice un poco”. A su vez Guerrero ha insistido con carácter general para que se tomen precauciones más meticulosos si se viaja a zonas con alto índice de propagación de la enfermedad y ha llamado a informar cuando se regrese a la propia consejería de Sanidad para facilitar el cribado y control de posibles nuevos focos de contagio.