VOX ha salido al paso de las declaraciones de Carlos Alonso y Claudia Avendaño, ex miembros de la formación de ultraderecha, para negar las razones alegadas para su dimisión. Vox niega la mayor y asegura que no solo mienten en sus argumentos sino que nunca llegaron a formar parte de la gestora, pese a que se les presentó como responsables del área jurídica y económica en el acto de formación de la gestora celebrado en  las Murallas Reales el pasado mes de septiembre.

“Su vinculación solo ha sido a efectos de colaboración en algunas de las áreas adscritas a la secretaria general de la gestora -niegan desde VOX, asegureando que nunca formaron parte de la gestora- colaboración esta, que ofrecieron tras contactar con nosotros a comienzos del mes de Agosto, y que por supuesto agradecimos y aceptamos, cesando esta participación a petición propia, en el mes de Noviembre, según manifestaron los interesados por motivos personales”, aseguran desde Vox en un comunicado. La fotogrfía que acompaña a este artículo desmiente a VOX. La imgen se tomó el pasado 20 de septiembre en las Murallas Reales durante el acto oficial de presentación del partido en Ceuta, acto en el que se presentó a Alonso y Avendaño como miembros de la gestora y como tales posaron en la foto de familia junto a Ortega Smith y Salud Anguita, de la dirección nacional.

Desde Vox entienden que los dos dimisionarios no han entendido el proyecto político de la formación de Santiago Abascal. “Desde Vox Ceuta lamentamos las opiniones vertidas por ambos sobre nuestro proyecto político, las cuales entendemos fruto de una visión errónea y distorsionada, derivada de una evidente falta de comprensión del mismo, pero que aun así y desde la discrepancia respetamos”, reprochan.

Programa nacional sin distinciones de raza, sexo o religión

Carlos Alonso, en declaraciones a Ceuta al Día, lamentaba la falta de un programa político para Ceuta y sus problemas concretos, una crítica que rebaten desde la formación de extrema derecha en Ceuta, aunque en cierto modo terminen dándoles la razón defendiendo la necesidad de un programa nacional ya que España es una unidad "indisoluble": “VOX es un proyecto común para todos los españoles, cuyo mensaje está destinado a dar respuesta a los graves problemas por los que atraviesa nuestra Nación y por ende Ceuta como parte indisoluble de ella, sin cabida para particularismos u otros tipos de intereses personales alejados del bien común.”

Tampoco la religión importa a Vox, salvo la católica, lamentaban los dimisionarios, extremo que no solo no niegan desde Vox sino que subrayan defendiendo la confesión religiosa como un asunto privado: “buscamos dar respuestas a los españoles estén donde estén o sea cual sea el territorio patrio donde residan, sin hacer distinciones de raza, sexo o religión, cuestión está última y que por alusiones cabe destacar, respetamos profundamente pero que entendemos desde la privacidad de la persona y nunca como elemento segregador del conjunto de los ciudadanos”.