El presidente de la Confederación de Empresarios, Rafael Montero Ávalos ha coincidido este martes en su parecer sobre la nueva ordenanza de terrazas con el concejal de Caballas, Juan Luis Aróstegui, cuando durante uno de los debates plenarios sobre la nueva ordenanza de terrazas, advirtió al entonces responsable de Medio Ambiente, Guillermo Martínez, que de aplicar la normativa sobre terrazas y veladores que se estaba gestando desaparecerían la mayoría de las terrazas del centro. Montero ha vaticinado este martes “un gran problema el 2 de enero”.

Con ordenanza en vigor desde este año, el Ejecutivo concedió una moratoria a los locales de hostelería para que adaptaran sus proyectos a la nueva regulación. Ese reloj de arena puesto en marcha por el Gobierno se agotará el 31 de diciembre. A partir del año nuevo las terrazas tendrán sí o sí que cumplir con lo dictado en la norma. Preguntado por esa adaptación a la misma, Montero no ha dudado: “Si se aplica la ordenanza, el 2 de enero la mitad de las terrazas tienen que desaparecer”, ha denunciado el jefe de la patronal.

“Son ordenanzas inútiles. Si fueran útiles ya estarían todas las licencias concedidas y todo el mundo regla”, ha señalado Montero, para poner en evidencia que muy pocos locales han adaptado sus proyectos de veladores y terrazas a lo recogido en la normativa, no tanto por falta de voluntad propia por lo rígido de la norma.

“No se están dando licencias con la agilidad que quieren los hosteleros y el problema es la normativa, que no es nada flexible. Los técnicos hacen su trabajo y te dicen: Yo tengo que aplicar lo que pone aquí. Hay entre 100 y 115 terrazas, yo le he dicho a la consejera que en este tiempo se podía haber estudiado ya una por una cada terraza, porque cada una tiene un problema distinto”, ha explicado Montero para quien la problemática es la falta de alternativas en la normativa que contempla que todas las terrazas tienen las mismas circunstancias alrededor, según el jefe de la patronal.

Montero cree que la actual norma es un “corta y pega” de otras normativas: “Málaga, Sevilla, Bilbao…”, ha ido enumerando para dibujar la idea de collage que ha arrojado una normativa que considera “inútil” y que no favorece la apuesta por la hostelería al servicio del turismo y del ocio ciudadano que quiere todo el mundo para aprovechar el clima del que goza Ceuta que empuja a la gente a la calle prácticamente todo el año.

Montero ha mostrado también su sorpresa por que a pesar del tiempo de adaptación, Fomento, la propia Román ha firmado un decreto dando un tiempo para “eliminar los elementos de una terraza”.

Para no dar lugar a dudas, el presidente de la patronal ha exculpado a los técnicos e incluso a los políticos. “La culpa no es del técnico en ningún caso. Aplica lo que el político ha aprobado. No estoy diciendo que el político ni los técnicos sean unos inútiles, quede claro. Ese inútil no es en contra del político ni del técnico. Tan sólo pedimos que se modifique la ordenanza”, ha reivindicado Montero, obviando que la normativa actual, como la nueva si finalmente se modifica, es un trabajo realizado por técnico y políticos, resulte inútil o no.