Una de la muchas diferencias que existen entre el Partido Popular y el PSOE es, que mientras el PSOE se dedica a crispar y generar polémica mientras los problemas de la sociedad avanzan como un gran leviatán, el Partido Popular se dedica a intentar aportar soluciones para aquellos problemas que acosan a todos los españoles.

Es sabido y notorio que el PSOE siempre juega a realizar “maniobras de distracción”, fundamentalmente de tipo polémico, generando nuevos problemas y enfrentamientos, estremeciendo a grandes sectores de la sociedad, con el único objetivo de intentar ocultar sus vergüenzas, vergüenzas que no son más que la grave situación socio-económica en la que se encuentra España, en gran parte y medida, por la falta de ideas de un Gobierno Nacional llamado a la foto de cara a la galería.

Uno de estos movimientos engañosos pero no por ello inofensivos, es la futura reforma de ley del aborto. Ley que cuando menos, despierta polémica y enfrentamiento entre sectores de la ciudadanía que hasta la fecha no tenían este problema. Esta reforma de la ley, desde luego no obedece a ninguna solicitud de la sociedad. Ya existía una ley que garantizaba la atención sanitaria de la demanda, y por supuesto, no existía ninguna mujer a la que defender demagógicamente por haberse practicado un aborto. El Partido Popular de Ceuta es una formación política y no entra en discusiones éticas sobre el aborto, pero si defiende la postura ciudadana de que este hecho es un fracaso de la sociedad, y en gran parte culpa de su Gobierno, de la responsabilidad política del PSOE, de su incapacidad para llevar a buen término la existencia de un ciudadano más, de su incapacidad de enseñar una correcta educación sexual y planificación familiar, de las precarias condiciones económicas y laborales que su inacción inflige a España, de la dificultad de adquirir una vivienda, de tantas y tantos asuntos que permiten que la desesperación lleve hasta el aborto. Es notoria la intencionalidad de la maniobra distractora y crispante al incluir entre sus términos la permisión de poder realizar el aborto con 16 años sin tener que pedir autorización, ni informar a los padres, apelando a la madurez de esos 16 años. Madurez que desde luego este Gobierno del PSOE no considera extensible al derecho al voto, carnet de conducir, venta de bebidas alcohólicas o una simple excursión con el colegio. También apelan a que la madurez intelectual, a veces, no va acompañada de la edad. Eso es cierto, no hay más que ver a algunos miembros del PSOE y sus pueriles acciones políticas. Tras ver las últimas actuaciones del Gobierno del PSOE: retirada de Kosovo, ley del aborto… No queda más que pensar que este Consejo de Ministros se reúne para madurar qué nueva polémica podrán sacar a la opinión pública, despreciando, con estas acciones, a la inteligencia de los españoles. España no se merece un Gobierno interesado en generar polémica cuando el paro azota a sus ciudadanos, cuando la pobreza amenaza a la población, cuando la deuda pública amenaza un futuro. España merece un cambio de política, un nuevo rumbo, un nuevo Gobierno, un nuevo viento que comienza teniendo ideas claras, convicciones sólidas y proyectos que incentiven y reactiven la actividad económica, y todo esto puede comenzar en las próximas elecciones del 7 Junio.