En la mañana de hoy, lunes, los trabajadores del Centro de Salud del Tarajal hemos sufrido de nuevo las consecuencias de la falta de planificación de los cargos a los que les correspondería un mínimo de previsión en sus decisiones.

No es la primera vez que sucede, y, de no mediar alguien con responsabilidad y que demuestre algo de sensatez y sentido común, nos tememos que no va a ser la última.

Ya al inicio de las obras de ampliación, tan necesarias para nuestro Centro, advertimos de la circunstancia de que, si se iban a ocupar por parte de los constructores los dos espacios que utilizábamos para aparcar nuestros vehículos, se tendría que arbitrar alguna solución para no vernos obligados a utilizar para ello la zona señalizada con pintura amarilla a todo lo largo de nuestra fachada.

Como se da la circunstancia de que entendemos mucho de circulación sanguínea, pero de la otra no tanto, pero como nos sobra sentido común, en su día nos permitimos el “atrevimiento” de sugerir como posible solución, que se permitiera ese vial como de sentido único. Ni caso.

La consecuencia es que, POR SEGUNDA VEZ, todos los vehículos aparcados en las cercanías del Centro de Salud, la mayor parte pertenecientes a trabajadores del mismo, han sido denunciados.

Ello nos obliga a tomar la decisión de hacer un paro simbólico de 5 minutos en las puertas de nuestro Centro, mañana martes a las 12,00 horas, decisión que deseamos transmitir a nuestros pacientes y autoridades.

1.- Somos conscientes de que las normas de circulación están para respetarlas.

2.- Entendemos el trabajo del policía municipal que denuncia cuando no se respetan esas normas.

3.- Nos solidarizamos con el pobre conductor de autobús que se las ve y se las desea para poder transitar por este vial.

Pero ¿nadie se solidariza, ni nos entiende a nosotros? ¿Cómo cataplines quieren que hagamos los avisos domiciliarios los médicos y las enfermeras? ¿A pie?