Por ello, los socialistas desde el Parlamento Europeo, hemos destacado el impacto negativo de las medidas de austeridad en el acceso de los jóvenes al mercado laboral, la necesidad imperiosa de invertir en educación y formación para poder salir de la misma, así como que se asegure el acceso a la educación gratuita y de calidad.

A iniciativa socialista, se ha solicitado, asimismo, que se ponga fin a los recortes presupuestarios y que se excluyan los gastos en educación del déficit público.

Y hemos promovido, también, que se garantice la transición de la educación al empleo a través de la normativa sobre el marco europeo de calidad de las prácticas, con el objeto de evitar la explotación de los becarios, asegurando sus derechos, asignaciones mínimas, seguros y seguridad social.

Si ahora que ha empezado la campaña europea, al Partido Popular tanto les preocupa la educación y las becas Erasmus, podrían explicarnos a todos los y las ceutíes dos cosas:

1) ¿Por qué votaron en contra en el PE de excluir las inversiones de los Estados miembros en educación, creación de empleo, prácticas e investigación y desarrollo de los criterios para establecer el déficit presupuestario (Informe sobre la “Acción Europea para combatir el desempleo juvenil”, párrafo 22, junio 2013)? Es decir, para que este tipo de inversiones no computaran a la hora de calcular el déficit de un país ya que son consideradas inversiones vitales para asegurar una salida sostenible de la crisis y reorientar la economía europea hacia la competitividad y la productividad.

2) ¿Por qué el Ministro Wert mintió cuando decía que el descenso en el Erasmus venía por la reducción en los presupuestos de la UE, utilizando como excusa las Instituciones Europeas para imponer recortes en las mismas hasta tal punto, que hasta la propia Comisión Europea tuvo que salir públicamente a desmentirlo?

Esta es la política en educación y en becas Erasmus que la derecha viene defendiendo tanto en Europa como en España: un sistema educativo elitista y para unos pocos y una reducción de las becas Erasmus cada año; todo ello, siempre, en detrimento de quienes menos recursos tienen y más ayuda necesitan. En el marco de políticas de juventud, los socialistas queremos, principalmente:

• Establecer “objetivos sociales vinculantes” para garantizar el mantenimiento de unos estándares europeos en educación, sanidad y prestaciones sociales ante cualquier coyuntura económica.

• Aumentar la inversión de 6.000 millones de euros de la Garantía Juvenil Europea a 21.000 millones de euros y aumentar su límite de edad para ayudar a los desempleados hasta los 30 años.

• Y establecer un marco de normas mínimas de la UE para realizar prácticas.

Por todo ello, pedimos a los y las jóvenes que nos ayuden, con su voto, a parar esta Europa de la precariedad y el exilio juvenil y sin derechos sociales a la que nos está condenando la derecha y a recuperar la Europa social y de oportunidades y la Europa ilusionante de la “generación Erasmus” que los socialistas hemos defendido… y defendemos.

¡Porque necesitamos una Europa que apueste, de verdad, por los y las jóvenes!